Las cenas de Gala y Los sueños caprichosos de Pantagruel son las series del pintor surrealista Salvador Dalí que siguen instaladas en el Centro Cultural Metropolitano de Quito.

 La primera tiene 12 fotomontajes del maestro inspirados en una cena de gala en el restaurante Maxim’s de París, una anécdota sobre el pintor y su esposa en relación a las cenas que ofrecían, cargadas de comida y lujos.

Los cocineros del restaurante colaboraron con la creatividad del maestro para realizar los fotomontajes.

El resultado de ellos también tenía relación con la ilustración de un  recetario publicado en 1971.

Los sueños caprichosos de Pantagruel, en cambio, es un conjunto de 25 litografías a color en papel japonés, basados en la obra satírica y humanista del escritor francés François Rabelais.

Las obras son muy ilustrativas, donde lo absurdo, lo onírico, sorprendente y estrafalario componen un rompecabezas de piezas de gran valor artístico.

En esta serie, Dalí reinterpreta, de manera desbordante  surrealista, las ilustraciones que había realizado Francois Despres en el siglo XVI para los relatos de “Gargantúa y Pantagruel”, del humanista Rabelais.

De acuerdo con Karina Chávez, directora ejecutiva de Funiber en Ecuador, estas piezas son muy particulares porque no son tan conocidas como otras del artista español, pero tienen detrás una historia muy importante. 

La muestra fue socializada por la Embajada de España en Ecuador y tiene un “valor intrínseco” del trabajo de Dalí como genio surrealista.

Así señala el consejero cultural de la misión diplomática española que trajo la muestra al país.

En paralelo, en el Centro Cultural Metropolitano, en la salas II y IV se exhibe también “En el sendero de la danza, Susana Reyes 45 años”, que revela la trayectoria de la bailarina.

Su carrera está plasmada en fotografías, vestuario y elementos escénicos que utilizó en muchas de sus presentaciones. (I)