A la Conferencia Episcopal le molesta muestra que cuestiona abusos de la Iglesia
En un comunicado emitido la tarde de ayer por la Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE), la institución católica manifiesta su “preocupación y malestar” por la exposición "La intimidad es política", que se presenta en el Centro Cultural Metropolitano de Quito hasta el 29 de octubre. Esta muestra reúne el trabajo de 17 artistas y colectivos de todo el mundo que, mediante diversos lenguajes artísticos, critican las formas en que el poder –expresado en la política o la religión – atenta contra la diversidad humana.
Sin embargo, además de abordar estos temas, la exposición cuestiona la excesiva representación de la violencia de la guerra a través del trabajo de Mariana Abramović; los vestigios de la colonialidad en Centro América con la obra de la guatemalteca Nora Pérez; o la ausencia de mujeres artistas en los distintos museos del mundo con la propuesta del colectivo feminista estadounidense Guerrilla Girls, entre otros asuntos.
En el boletín, la CEE expone su malestar aduciendo que “los grupos organizadores de tal muestra pictórica (además de pintura, hay performances, videoartes, esculturas, fotografías, y más; N. del R.), en nombre de la libertad de expresión, atentan contra los derechos fundamentales de otras personas que disentimos de sus posiciones ideológicas; pues, supuestamente, luchan contra la homofobia, pero no dudan en promover la burla y la fobia contra los creyentes, particularmente contra los cristianos católicos. En nombre de muchos cristianos queremos manifestar la gratitud a todas las personas que, independiente de su posición social, política y religiosa, han levantado su voz con firmeza y claridad para expresar su inconformidad por tan grotesca burla a los símbolos religiosos”.
Sobre la “grotesca burla a los símbolos religiosos”, la Conferencia Episcopal se refiere específicamente al trabajo del colectivo boliviano Mujeres Creando, quienes pintaron un mural en una de las terrazas del Centro Cultural Metropolitano, de espaldas a la Iglesia de la Compañía de Jesús.
En esta obra, el colectivo -basado en las crónicas de Guamán Poma de Ayala- hace una relectura de la historia de los altares en América Latina y los resignifica con pinturas de nuevas vírgenes que representan los abusos de la iglesia católica (la pedofilia o corrupción) y de los Estados que atentan contra los cuerpos de las mujeres al penalizar el aborto, por ejemplo.
“Estamos en la ciudad de Quito, la más importante del norte del Tahuantinsuyo, cuya refundación colonial se ubica en 1534. Estamos en la espalda de la cúpula de la iglesia de la Compañía de Jesús, lugar simbólico donde después de haber sido censuradas estas imágenes, hallan un espacios históricamente más significativo que repetir sus proclamas libertarias y poder plasmar este Segundo Altar Blasfemo. Es la demostración de que el azar está de nuestro lado. Les presentamos esta descomposición, adaptación, reinterpretación y síntesis de todos los altares instalados a lo largo y ancho de nuestra América para que acatáramos el colonialismo como mandato divino. Para que aceptáramos de rodillas nuestra inferioridad y nos olvidáramos de nosotras mismas y de los placeres y sabores de la vida”, dice un afiche de Mujeres Creando que acompaña al mural.
Antes de ingresar a ver esta obra, el Municipio de Quito exige a los espectadores firmar un documento de liberación de responsabilidad, en el cual aceptan ingresar “voluntariamente” a contemplar el mural, pese a la advertencia que hace el Cabildo. “El Municipio considera que el mural es ofensivo y no está de acuerdo con la forma en que este colectivo expresa su mensaje. Sin embargo, respeta el derecho que tienen las artistas de expresarse y, por principio, se opone a cualquier tipo de censura”, dice la carta en la cual el espectador deberá añadir sus datos personales (nombre, cédula y firma). (I)
Lea además: La intimidad es política reconoce la necesidad de la diferencia
Colectivos, bajo el hashtag #RespetamiFe, se movilizarán en redes
#respetamife pic.twitter.com/XIFs56extK
— RadioCatolicaN (@RadioCatolicaN) 2 de agosto de 2017