Hemos contado al mundo, a nuestros aliados y amigos, cómo hemos sufrido el terrorismo originado en Siria. Como miembro comprometido de la Red Global contra DAESH/Estado Islámico, Turquía es el primer país en desplegar fuerzas de combate para luchar contra esos terroristas.
Sin embargo, la amenaza del terrorismo originado en Siria se dirige a nuestras fronteras y no se limita a DAESH/Estado Islámico. Durante los últimos dos años, especialmente desde el este del río Éufrates, hemos estado expuestos a más de 100 ataques o actos hostiles por parte de PYD/YPG, la rama siria de PKK, que está designada como una organización terrorista por EE.UU., la UE y la OTAN.
Lamentablemente, nuestras conversaciones sobre el establecimiento de una zona segura no han sido concluyentes. Finalmente, hemos llegado a un punto en el que tuvimos que hacernos cargo por nuestra propia cuenta para eliminar la presencia terrorista en nuestras fronteras.
La operación “Fuente de Paz” tiene por objeto garantizar la seguridad de nuestros ciudadanos y de la población local, controlando desde nuestras fronteras a los terroristas. También permitirá a los sirios que viven en nuestro país, que son expulsados por amenazas terroristas, regresar a su patria.
Con este fin, Turquía busca crear una zona segura entre el río Éufrates y la frontera entre Siria e Irak, con el objetivo de lograr que las Fuerzas Armadas turcas lleven a cabo una operación extremadamente meticulosa, sin infligir el más mínimo daño a los civiles.
Finalmente, como se ha dejado claro a nuestros aliados y a todas las partes interesadas, esto se limita a una operación antiterrorista. Reiteramos nuestro compromiso con la integridad y la unidad territorial de Siria. (O)
Oya Tunga ҪÇağli, embajadora