Publicidad

Ecuador, 27 de Noviembre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo

Señor Edwin Ulloa

01 de octubre de 2011

San Ramón, 28 de septiembre de 2011


Señor Edwin Ulloa

Director de


diario El Telégrafo

Presente

Estimado señor Director

El editorial “Chevron y la justicia ambiental”, de Fander Falconí, publicado en su diario, tiene varios errores.
Lejos de ser elogiada, la sentencia del juez Nicolás Zambrano, emitida el 14 de febrero, debe ser calificada de fraudulenta. ¿Cómo este juez en 58 días ha analizado 225.000 hojas de expediente (más de 3.800 hojas de lectura por día) y ha escrito una sentencia de 188 páginas sobre un caso tan sensible y complejo?
La explicación es clara. Expertos en análisis forense de EE.UU. y España concluyeron que la sentencia no fue escrita por el juez. La sentencia copia documentos y datos internos de los demandantes, obtenidos recientemente por Chevron por orden judicial en EE.UU., que no existen en el expediente. Se trata de una ilegal colaboración entre los demandantes y el juez y una violación del debido proceso. Chevron exige que se revoque la sentencia y se declare nulo el proceso.
El señor Falconí acusa de cabildeo a Chevron por haberse acercado a la embajada de EE.UU., pero ignora que los demandantes también acudieron a la embajada, según cables de WikiLeaks.
Chevron siempre ha dicho que ha mantenido conversaciones con funcionarios de la embajada y el Gobierno de Estados Unidos, a fin de asegurar que sus derechos contractuales en el Ecuador  se vean protegidos, así como los tratados firmados entre los dos países.
El ex canciller sin duda conoce que es grave para un país no cumplir con sus obligaciones bajo el derecho internacional. 


Atentamente

James Craig
Asesor de Comunicación para América Latina
Chevron Corporation

Contenido externo patrocinado

Ecuador TV

En vivo

Pública FM

Noticias relacionadas

Social media