Es incompatible el arte de la política y el odio; y si ambos llegaren a consolidarse para aparentar unión, no surte efecto armonioso, ya que están de por medio los intereses que se transparentan en los momentos decisivos en lucha de poderes.
El país está en plena campaña electoral por referéndum y consulta popular. Todos los partidos de la partidocracia están unidos a favor del Sí abiertamente, aunque no lo exterioricen, contra el expresidente Correa.
Esta unión no se enfrenta a otro partido, sino a una convicción política que proclama que la consulta no estuvo entre los postulados básicos del plan de gobierno que ganó las elecciones.
El pueblo está aprendiendo a discernir, más aún ahora que cuenta con avances tecnológicos que sirven para que el hombre actúe con plena conciencia a su derecho de tener una vida mejor. (O)