Depresión, una de las enfermedades más complicadas de distinguir a simple vista; pero cuyas características sí se pueden identificar por los sentimientos de tristeza, nostalgia, abatimiento y decepción que anteceden incluso a desenlaces fatales.
Saludar con respeto, llamar a una persona por su nombre, dar las gracias, pedir las cosas con amabilidad, una sonrisa, un abrazo, un “no estás solo”, “lo puedes lograr”, un “te quedó delicioso”; son palabras que pueden representar un gran cambio en alguien que está por tomar malas decisiones.
No olvidemos nunca que existen esos pequeños detalles, que no nos restan y más bien suman para hacer felices a quienes se cruzan en nuestro camino; y que pueden transformar la vida de alguien deprimido. (O)
Martha Isabel Heras Jara