¿Quiénes dicen no a los enlaces? Los que fueron poder y nunca informaron nada, los que aspiran a llegar el poder para no tener el compromiso de informar.

Gracias a los enlaces, ahora todos los ecuatorianos -incluidos los opositores- conocemos en qué se invierten los
recursos del Estado, así como ya somos partícipes de las gigantescas obras en ejecución y de los grandes cambios y transformaciones en proceso. Camino a la excelencia.

Gracias a los enlaces, pueblitos y su gente, ignorados por siempre y por los mismos de siempre, hoy tienen el honor y la satisfacción de compartir de cerca con el señor Presidente; en el pasado, ni habiendo sido invitados, asistían a capitales de provincia.

Gracias a los enlaces, hoy sabemos qué intereses primaban en la mente de funcionarios del ayer, quienes con cierta ironía hoy se atreven a criticar las reacciones y actitudes patrióticas de este gobierno, los mismos que en su momento no supieron defender al país.

Gracias a los enlaces, el pueblo hoy está informado con la verdad, con aquella que siempre nos han mal informado quienes hoy reciben semanalmente lecciones de cómo se debe gobernar.

Los enlaces sabatinos y los programas sociales Manuela Espejo y Gallegos Lara son un acierto vivo y elocuente de
ejemplo a seguir para futuros gobernantes y para el mundo. Solamente el odio no le permite a la oposición valorar
y reconocer los grandes logros de este Gobierno.

¿Quiénes dicen sí a la inmunidad sin límites? Todos aquellos “honorables” que piensan que ser oposición es oponerse a todo. Con su actitud de respaldo a esta inmunidad, claramente se están alineando a la misma altura y conducta de aquellos que sin inmunidad se les caen los pantalones.

Si como fiscalizadores conocen de incorrecciones administrativas de funcionarios de este Gobierno, lo lógico, ético y transparente sería recurrir a las autoridades correspondientes con la documentación de respaldo a sus denuncias. La Constitución de la República respalda este procedimiento.

Quienes hacen gala de prepotencia, valentía y agresividad en sus intervenciones, cuando son requeridos por sus afectados, deberían demostrar esa misma actitud renunciando por sí mismos a su inmunidad muy mal entendida, sinónimo de cobardía.

Fabián Chiluiza Villalva
C.C. 180002675-7