Todo lo malo, lo feo y lo absurdo que hizo, hace o va a hacer EE.UU. se explica con el decir “así es América”, pero ni ese decir justifica sus actos aberrantes actuales. Así, las sanciones a Rusia por incumplir los acuerdos de Minsk son un galimatías que ni el más ducho en jeroglíficos podría discernir. Rusia, Francia y Alemania fueron garantes.
Desde entonces, cada vez que el gobierno de Poroshenko incumple este pacto, solo Rusia, que solo es garante, es acusada de no cumplir los acuerdos de Minsk y es castigada con nuevas sanciones; no son tomadas en cuenta ni Francia ni Alemania, que tienen la misma responsabilidad que Rusia; y a Kiev ni siquiera se le llama la atención. Pagan justos por pecadores. Uno de los muchos botones que adornan la camisa del imperio. (O)
Rodolfo Bueno