Muchos habitantes de las zonas rurales de Ecuador ven oportunidad en las grandes ciudades, como Guayaquil, Quito, Cuenca, Ambato, Machala, para mejorar su estatus de vida, educar a sus hijos y lograr bienes que por las dificultades de la vida campesina y abandono de la actividad agropecuaria por parte de gobiernos no lograrían, por eso buscan migrar a grandes centros poblados y ser parte de manera digna de la Economía Popular Solidaria (EPS).
Debemos lograr una real articulación entre ministerios, instituciones, gremios agropecuarios, actores de EPS, con verdaderos y serios planes de desarrollo agropecuario, con nuevas autoridades comprometidas con el desarrollo social y económico del sector campesino, solo así lograremos el nivel que merece nuestro habitante del campo. (O)
Pedro Pablo Jijón Ochoa