Lo veníamos presintiendo, como que ya lo estábamos viendo, era una crónica de muerte anunciada, dieron la puñalada en el momento propicio y en buena hora que ya lo hicieron, ya sabemos cómo son y quiénes son. No debemos sorprendernos, el mentalizador ya tiene a su haber un largo historial de traición. Comenzó dizque de dirigente universitario del FRIU y a punta de garrote y agresión a los jóvenes socialistas revolucionarios y comunistas pudo ser presidente de la FEUE.

Cuando los chinos se desbandaron a raíz de la muerte del presidente Mao, encabezó una fracción que se autotituló los ‘albaneses’, porque eran los más ¿radicales?, luego de deambular por Pachakutik, pernoctó (no se sabe si temporalmente) por lo que queda de la socialdemocracia, ojo que no es socialdemócrata, apareció para dividir, en eso es especialista; desde sus inicios fue su consigna.

En la Asamblea de la UNIDAD DE LA IZQUIERDA, una barra que coreaba la consigna del ministro-presidente fue acallada por la irrupción de los choferes profesionales con el clamor del pueblo ecuatoriano: ¡Reelección, Correa presidente!; mientras el divisionista gozaba desde primera fila, con su sonrisa sabía que había hecho bien su trabajo, esta vez de provocador. Así caló en la socialdemocracia, impresionó a unos cuantos nóveles y oportunistas con el cuento de todo contrarrevolucionario: somos libres e independientes, esto lo interpreta muy bien Philip Agee para describir quiénes usan con frecuencia estos epítetos y consignas; con ese cuento fueron los preferidos del imperio para despotricar contra la Unión Soviética, Cuba y Allende, nunca fueron ni maoístas ni chinos ni nada, fueron simplemente divisionistas y traidores. No se sabe si también agentes de la CIA.   

Ing. Salomón Fuentes Vidal, Esp.