Uno de los males que más han afectado al país es la mala memoria de nuestros compatriotas; mucha gente ha olvidado tan pronto a los políticos que nos perjudicaron, con sus malas artes y desgobierno, de eso se han aprovechado muchos, para volver a postularse, pese a estar descalificados.
Pero qué bueno que ahora tenemos las sabatinas, para que el señor Presidente nos refresque la memoria, informándonos de lo bueno de su gestión y lo miserable de la oposición, que conspira para que el Gobierno fracase. El pueblo tiene que saberlo todo, cómo era el país hace 8 años y cómo estamos ahora.
Por eso es prohibido olvidar, necesitamos saber quiénes fueron los mentirosos, los enloquecidos por el dinero, violadores de los DDHH, los vendepatria y los acolitadores del imperio, y tanto farsante que nos tenían sumidos en la miseria y el subdesarrollo. Pero como se dice: ‘No hay mal que dure mil años, ni pueblo que lo resista’, hoy tenemos a la Revolución Ciudadana (RC), reconstruyendo y cambiando al país. Pero cuidado, aún hay resentidos, malos ecuatorianos enquistados en la burocracia, que conspiran con sus malas prácticas, tratando de opacar la obra del Gobierno.
A propósito de cierta burocracia; sé puntualmente de un caso de despido intempestivo de una joven madre en pleno período de lactancia, quien fue separada de su trabajo sin explicación alguna. Y lo más grave es que entre ellos se cubren las espaldas y hacen alarde de espíritu de cuerpo, tapándose sus fechorías; haciendo difícil denunciarlos.
Qué bueno sería hacer un seguimiento a estos malos servidores, para que sean sancionados y que nadie obstruya el proceso de nuestra revolución y siga adelante con 8 años más y concluya su obra con éxito. Los ecuatorianos conscientes somos más y seguiremos respaldando en las urnas para cosechar nuevas victorias hasta siempre.
Atentamente
Manuel Bravo
Un soldado de la RC