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El Telégrafo

La esperanza es lo último que se pierde

17 de octubre de 2015

‘12 años de esclavitud’ es una de las películas que refleja la cruda realidad de cómo los negros fueron esclavizados y maltratados cruelmente en el año de 1853 y su lucha por una libertad justa.      

Y lo que le ocurrió a Solomon Northup, un afroamericano nacido en Nueva York, con una familia y un trabajo justo, que fue secuestrado y esclavizado durante 12 años, es una de las más grandes injusticias, y en donde se puede ver cómo un ser humano puede llegar a ser maltratado por otro ser humano.

La violencia que existía no solo era para Solomon Northup, sino para todos los afroamericanos por el hecho de ser de un color distinto. En el filme hay escenas que dejan al espectador pensando en que si se es distinto, entonces, es malo y debe ser maltratado.  

Pero qué es lo que realmente ocurría: que por el hecho de ser una ‘mercancía’, como denominaban a los esclavos, no eran seres humanos, no sentían, no pensaban. Es un poco frustrante observar durante todo este tiempo una película que refleja solo odio, y coraje hacia los negros.

Pero por otra parte, la película brinda a la audiencia un conocimiento mucho más amplio y real de cómo fueron maltratados cruelmente los negros, además da un mensaje para que no existan el racismo y la discriminación.

Era irónico que la mayoría de estas personas blancas leyeran la Biblia, sin embargo hacían lo más macabro que podía existir, que es sostener a alguien en contra de su voluntad.

Otro de los problemas que ha existido desde esa época, y le ocurrió a Patsey, amiga de Solomon, es el maltrato, la denigración hacia la mujer, y ser tratada como un objeto sexual.

Una escena importante de destacar es cómo a Solomon Northup, a pesar de ser un esclavo, no le gustaban las injusticias, y él se defendía cada vez que sabía que tenía la razón y por este motivo era castigado con azotes varias veces.

Sin lugar a dudas, es merecido el premio Oscar a la mejor película que le entregaron, pues el filme trata una gran problemática que se ha vivido durante muchos siglos. Creo que también se debería resaltar que la “esperanza es lo último que se pierde”, y que aunque Solomon Northup permaneció 12 años como esclavo, él nunca dejó de intentar escapar y luchar por su libertad. (O)

Henry Navarrete Chilán
Portoviejo, (Manabí)
Estudiante de Comunicación Social de la Universidad San Gregorio de Portoviejo  

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