Aunque entendamos mucho o poco sobre la inteligencia artificial, ya forma parte de nuestro diario vivir; se encuentra en medios y plataformas digitales que visitamos todos los días, ayudando a crear o a controlar de manera más efectiva ciertos contenidos, claro que la parte humana siempre se encuentra monitoreando para que todo funcione bien.

¿Y si vamos más allá? No pensando en servicios sino en una inteligencia artificial independiente, aquella que no necesite del ojo humano; es lo que podemos ver en el videojuego Detroit: Become Human, para PlayStation 4. El juego muestra el desarrollo de la inteligencia artificial en máquinas que se ven como humanos, llamados androides.

A medida que el juego avanza, la “vida” del androide se ve en diferentes situaciones, algunas reflejan lo que algunos ya se han preguntado, como aquello que las máquinas reemplazarán la mano de obra humana, dando como resultado la falta de empleo, pues los androides no tienen necesidades básicas, como comer, vestirse, etc.; no generan gastos.

Pero esta tecnología desarrollada por los humanos resulta peligrosa, ya que los androides se dan cuenta de que no son simples máquinas para servir, al descubrir el libre albedrío y los sentimientos.

En el futuro existirán seres que no serán de carne y hueso, con su propia comunidad en la que también puedan elegir a su propio líder político para enfrentar a los humanos y exigir libertad e igualdad de derechos. Es un poco loco e irreal pensar que esto puede pasar en el futuro, pero la tecnología que usamos todos los días también se vio de esta forma hace muchas décadas.

Algunos videojuegos no solo pueden entretener contando historias de ficción, también ofrecen una mirada distinta de lo que podría convertirse en una realidad no muy lejana. (O)

Samantha Jijón Gagliardo