No solo las semillas pueden ser transgénicas, también las ideas: la abundancia y floritura de ellas, pero cada vez más vacías y políticamente dañinas a la sociedad.
Uno de sus distinguidos exponentes es el ultrademócrata Dr. Fabián Corral (2013-02-04), quien titula su comentario “Democracia sin ideas” cuando honestamente debería encabezarlo “Demócratas sin ideas”. Entonces, como gran teórico, Corral sí aporta ideas “democráticas”: “que sea el pueblo el protagonista y el gestor” (cuando un par de veces él ha sostenido que “el pueblo no existe”), que vivimos la decadencia de la democracia representativa”, “que han mediatizado a la República”, que se pone en entredicho “la eficacia del voto”, se cuestiona el poder y se muestra “la decrepitud a la que se ha conducido a la República”; para él, toda manifestación gubernamental es “la civilización del espectáculo”…
Lo más grave es que para Corral “el pueblo no existe”. ¡Claro!, no existe como entidad porque les soba en cada elección desde hace seis años y para siempre… Y les soba con el socialismo moderno; sí, al amparo del socialismo moderno -democracia real y representativa-, ya no de la decadente e ilusoria democracia burguesa y capitalista, renacida luego de que cayera la guillotina francesa sobre sus pescuezos. En cambio, según su torcida opinión, si la oposición estuviera en el poder, sería “la voz de Dios”, etc., etc., etc.
En otro punto, por lo regular, los dislates deben pasarse por alto; pero a veces tal es el número de sandeces (por no decir estupideces), con el agravante de que se publican en un diario connotado, que dejarlas pasar casi lo convierte a uno en su cómplice. Tal es el caso del comentario “Al cierre de la semana”, de Martín Pallares 2013-02-03); sus expresiones solo pueden atenuarse por padecer un patológico origen bilioso, hepático o cerebral. Tanto odio destila el señor “periodista” desde sus vísceras íntimas y secreciones purgatorias, que ahora sí puede verse claro aquello de “la prensa amarilla” a la cual sirve. Bien escribía sobre ciertos periodistas hace 130 años Federico Nietzsche: “Vomitan …. y luego escriben en el periódico”.
El “periodista” acusa al presidente Correa, quien se defiende de una ofensiva caricatura, de: prepotencia, atribuirse la propiedad de la verdad, torpeza, intolerancia, y añade: “No faltaba tampoco el lenguaje ampuloso típico de esos abogados que a la vejez deciden adornarse de poesía”; afirmación de ignorancia histórica perdonable en un guambrito, porque la verdad, no conozco un solo caso de esos, a pesar de que soy un viejo abogado, doctor en Jurisprudencia por 53 años, y no creo que se refiera a Remigio Romero y Cordero, Remigio Cordero, Juan B. Vela o Pablo H. Vela. En fin, siempre repugna toda reacción desproporcionada…
Dr. Catón Villacreces Jácome
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