La tendencia en nuestro país es buscar empleo en el sector privado o público, perpetuarnos en el trabajo y esperar la jubilación como meta para un feliz descanso. No arriesgarnos, no incursionar en algo nuevo o diferente, no buscar una segunda fuente de ingreso honesto. Terminamos haciendo las mismas actividades durante años pero soñamos con un gran cambio en nuestras vidas. La juventud bien portada y estudiada no tiene oportunidades para apuntalar sus ideas o proyectos con tasas de interés inferior al 5% y con una capacitación financiera, tributaria y de ventas. Si a esta juventud no se la apuntala a tiempo Ecuador no se expandirá. Recordemos que ningún país en el mundo crece solo con empleados públicos o privados. Se requiere materializar sueños de emprendedores, apuntalar a los microempresarios. (O)
Lcdo. Gunnar Lundh