Quito, 7 de julio de 2013
Señor Director:
El excelente editorial de este domingo, por su apreciación histórica, adecuada valoración política, apego a la verdad y valiente defensa de ella, es digno del diario público de su digna dirección.
En la misma edición, es invalorable el aporte de la autorizada voz de Noam Chomsky, resumiendo las agresiones de Estados Unidos (y su aliado en la sombra, Israel) a nuestro continente, concretamente a Guatemala.
También el viernes anterior, El Telégrafo reveló las donaciones de un miembro de la familia Isaías a la política norteamericana. Esas contribuciones explican, en parte, la impunidad de los Isaías en ese país.
Con esos importantes aportes, muchos ciudadanos apreciarán de mejor manera la política interna y la internacional, comprendiendo la diferencia entre el diario público y la prensa comercial que calla u oculta esas verdades.
Esas posiciones son un elemento más para valorar la presencia de la comunicación pública, haciendo realidad los objetivos de la Ley de Comunicación.
Atentamente
Oswaldo Mantilla