Con emoción y preocupación vemos en los medios de comunicación las protestas de miles de personas llenando las calles de sus ciudades, alzando sus voces contra gobiernos que aplicando las recetas del neoliberalismo pretenden salvar a bancos y grandes trasnacionales sin que les importe la calidad de vida de la gente. Más que oportuno el comentario al respecto del recordado Presidente Chávez, cuando decía con sorna que si el problema del cambio climático fuera un banco ya lo habrían salvado.
Sería tan largo y difícil analizar en tan corto comentario la raíz de todo esto, pues los líderes políticos se han manejado siempre dentro de los límites del capitalismo feroz e individualista dejando al margen a las comunidades pobres y desposeídas.
Ahora, los países sudamericanos y latinos con sus gobiernos progresistas dirigidos por líderes bien intencionados y humanos se han unido dando el ejemplo a un mundo tan dispar y desigual. Al fin tratamos de seguir la idea sagaz de Bolívar, que ya en su tiempo pudo advertir el peligro que las grandes potencias representaban para una América disgregada, pero hoy podemos decir que Latinoamérica está de pie, con respeto de las propias diversidades que cada país posee.
El Ecuador es un país que avanza a pasos agigantados, pese a la dura lucha que significa un cambio. Nuestros líderes están dispuestos a trabajar arduamente para seguir por este camino trazado, dejándonos la tranquilidad de saber que nuestra Patria está en las mejores manos.
Esperemos que pronto podamos decir: el Mundo despertó.
Soledad Cuesta Ordóñez
CI: 170077583-4