Estimados todos:
El día de ayer, diario El Comercio publicó un editorial de Miguel Macías Carmigniani, “¿Familia alternativa?”. Lo dicho allí generó reacciones en muchos sectores por su alto contenido de intolerancia y aversión. Para la tarde, El Comercio lo retiró de su página web y emitió una disculpa pública.
A continuación, les dejo un blog, en el cual constan: el editorial citado, las “disculpas” de El Comercio y el mismo editorial escaneado.
El editorial recoge explícitamente el tema de la homosexualidad ligada a concepciones retardatarias religiosas, morales e ideológicas. E implícitamente, la responsabilidad del medio de comunicación que lo aceptó y publicó, necesario en este contexto de debate respecto a “libertad de expresión”.
Sobre este punto, me llama la atención la justificación del diario: “fallaron los filtros correspondientes”. ¿Cuáles son esos filtros que utiliza para llevar adelante sus tareas? Es necesario que El Comercio haga públicos sus mecanismos o “filtros”, pues, a más de justificarse diciendo que se trata de una “opinión” de carácter personal, existen esos “filtros” que permitieron su publicación.
Obviamente, el debate sobre libertad de expresión se enriquece con esta perla de intolerancia y odio. ¿Acaso los medios de comunicación no han peleado para impedir los intentos de alguna ley de comunicación bajo el supuesto de que “la mejor ley es la que no existe” y que la mejor opción es la de “autorregularse”? Irónico, una “autorregulación” con filtros defectuosos o cómplices...
Finalmente, esa perla pasará a la historia: fue publicada por diario El Comercio justo, justo, un 24 de mayo... fecha que recoge todavía un conjunto de ideales de la sociedad ecuatoriana.
Marcelo Medrano