Señor Director:

Me refiero a la caricatura política aparecida en la página 12 de la  edición del reciente viernes 6 de noviembre de diario EL TELÉGRAFO. La política petrolera de mi gobierno generó grandes ganancias económicas y no pérdidas que merezcan la “repetición” aludida por el autor con el seudónimo Calvin. Solo 2 medidas de mi gobierno generaron un aproximado de $ 2.000 millones de dólares, desde mayo 2006, fecha de su inicio, hasta diciembre.

Un cálculo aproximado de los primeros tres años (2006, 2007 y 2008) superan los $ 12.000 millones de dólares que no  habrían ingresado al Estado sin las medidas que tomó mi gobierno y que deben haber continuado en ascenso los siguientes años hasta la reciente crisis. Por la trascendencia que la caricatura le da al aspecto económico de la declaración de caducidad de la Oxy, es necesario señalar que, desde el punto de vista estrictamente financiero, el mejor negocio fue tomar esa medida, así como no  tomarla habría sido el peor.

El fundamento jurídico y soberano de mi política petrolera ha sido expuesto y está a disposición de quien lo quiera encontrar. Solo existe un antecedente histórico en América Latina. El señor periodista podría no estar de acuerdo con la política ni con las medidas petroleras de mi gobierno. Aunque tiene el deber de respetarlas, está en su derecho.

En cambio, no puede afirmar, ni siquiera sugerir, que Ecuador perdió dinero como consecuencia de una de esas medidas. No  lo puede hacer por ser falso. No puedo esperar que defienda mis tesis, si no cree en ellas, pero puedo esperar que la prensa seria no convoque a levantar el patíbulo para un presidente que provocó ganancias y no pérdidas. Por lo menos eso.

Espero, señor Director, la publicación de esta carta en el espacio correspondiente a su importancia nacional.

Ratifico mis altas consideraciones para el señor Director y los periodistas de diario EL TELÉGRAFO.

Alfredo Palacio
Expresidente Constitucional de la República del Ecuador