Guayaquil, 18 de septiembre de 2014

Sr. Lcdo. Orlando Pérez
Director diario EL TELÉGRAFO
Ciudad

De mis consideraciones:

En calidad de director ejecutivo y representante legal del Observatorio Ciudadano de Servicios Públicos, expreso nuestro cordial saludo.

Haciendo uso de mis derechos constitucionales y legales de participación ciudadana en los asuntos de interés público; y en uso de la Ley de Comunicación artículos 22 y  23, con el debido respeto y consideración, solicito rectificar el titular y la noticia del jueves 18 de septiembre  en la primera plana que dice: ‘Masivo respaldo’.

El mencionado titular y el desarrollo de la noticia en las páginas 4 y 5 corresponden a la edición de un periódico oficial del Gobierno Nacional o de Alianza PAIS y no de un diario público que se financia con recursos del pueblo ecuatoriano.

“Los medios públicos[1] son medios hechos, financiados y controlados por el público, para el público. No son comerciales ni de propiedad gubernamental, son libres  de la interferencia política y la presión a partir las fuerzas comerciales.  A través de los medios públicos, los ciudadanos son informados, educados y también entretenidos…”.

Señor Director, usted mismo, en una entrevista de Fernando Arellano Ortiz, publicada mayo del 2012[2] decía: … “Nosotros somos voceros, tanto de las buenas como de las malas noticias. No somos voceros del Gobierno ni de partidos políticos, tampoco de entidades, ONG ni nada por el estilo. Cuando hay malas noticias las publicamos…”.

“… El gran reto para nosotros es convertir a EL TELÉGRAFO en el mejor periódico del Ecuador, para lo cual debemos hacer el mejor periodismo posible, tenemos que llegar a la mayor parte de gente y una tercera condición, que es muy importante: que la gente comente, discuta, reflexione y debata sobre lo que nosotros publicamos. Y al mismo tiempo que nosotros podamos publicar lo que la gente comenta y discute sobre su vida cotidiana y que la vida del país sea reflejada en el periódico y que el periódico también acompañe los procesos de la gente para cambiar y confrontar la realidad y, al mismo tiempo, que nosotros podamos tener un espacio donde las ideas circulen, se proyecten y se retroalimenten constantemente. Ese día diré: ‘Hasta ahí llegamos’, porque ya es bastantísimo haberlo hecho. Más allá de que vendamos o no vendamos, porque a veces nos dicen que no se vende, pero es que nuestro interés no es el lucro. Nosotros no estamos haciendo un periódico para ganar plata, si no vendemos tendremos que sostenernos de otra manera, pero el periódico tiene que sostenerse por esa condición fundamental”.

Sus palabras y conceptos  no están siendo aplicados en el medio que actualmente dirige, pues su medio invisibiliza a un importante sector de la ciudadanía y de las organizaciones y movimientos sociales que  el día de ayer, en ejercicio de nuestros  derechos, marchamos con la esperanza de ser escuchados y atendidos en nuestros planteamientos y propuestas que son y han sido públicas.

Espero, señor Director, que siendo fiel a sus palabras y convicciones corrija los contenidos y estilos periodísticos oficialistas y genere espacios de difusión de las ideas, propuestas y acciones de personas y organizaciones que divergemos con las actuales corrientes políticas y sociales, y convierta a EL TELÉGRAFO en un gran diario verdaderamente público.

Fraternalmente   
César Cárdenas
Director Ejecutivo
Observatorio Ciudadano de Servicios Públicos