Señor Fernando Larenas
Director Editorial
Diario EL TELÉGRAFO
Con referencia a la Carta al Director, publicada el pasado 24 de marzo del presente año, titulada: “Maestros honorarios son separados de la Universidad de Guayaquil”, es nuestro derecho el pedir la respectiva aclaración de lo escrito por el Ing. David Freija Rivadeneira, M.Sc.; tal y como lo indica la Ley Orgánica de Comunicación, en su artículo 24 que dice: “… Toda persona o colectivo humano que haya sido directamente aludido a través de un medio de comunicación, de forma que afecte sus derechos a la dignidad, honra o reputación; tiene derecho a que ese medio difunda su réplica de forma gratuita, en el mismo espacio, página y sección en medios escritos, o en el mismo programa en medios audiovisuales y en un plazo no mayor a 72 horas a partir de la solicitud planteada por el aludido (…)”.
El texto de la carta, dice: “… Maestros honorarios son aquellos que siendo jubilados por mandato de la ley se les permite continuar en el dictado de sus clases; o aquellos declarados como tales en la sesión solemne de aniversario de Universidad de Guayaquil, además de que deben cumplir con los requisitos exigidos por la Ley de Educación Superior. Durante el desarrollo de sus actividades académicas, antes y ahora, han recibido muestras de respeto y de consideración, según análisis y visitas de aulas de una comisión calificadora y avalados por los estudiantes, resultando altos, como lo demuestran las estadísticas presentadas a las autoridades (…)”.
Ante esto, la Universidad de Guayaquil aclara que, según el Reglamento de Carrera y Escalafón del Profesor del Sistema de Educación Superior, los maestros honorarios podrán vincularse laboralmente a las universidades cada vez que se justifique la necesidad institucional y serán contratados bajo la modalidad de servicios profesionales o mediante contratos técnicos especializados, sin límite de tiempo.
La Universidad de Guayaquil maneja una programación de contratación de docentes para completar la necesidad institucional una vez que se ha realizado la ubicación de los profesores titulares, a través de un análisis de pertinencia académica. (O)
Galo Salcedo Rosales, Ph.D.
Rector Universidad de Guayaquil