En el Ecuador de la revolución ciudadana otro escándalo de corrupción debe ser investigado en la Asamblea por faltas propias a la ética y a la ley. Llueven las denuncias de excolaboradores, asesores designados por pedido de los mismos asambleístas, quienes por esto se han creído con el derecho de exigirles “recompensa”, básicamente pecuniaria, con aportes económicos que debían entregarles al momento de recibir sus emolumentos mensuales, destinados en cantidades importantes para el “partido político” al que pertenecen o para satisfacer las necesidades particulares de sus “jefes”. La Asamblea debe cambiar el modo de designar a sus asesores y designar a conocedores de leyes en lugar de compadres o prestanombres. (O)
Dr. Rodrigo Contero Peñafiel