Necesitaríamos tal vez varios días para intentar resumir todo lo que implica el Compañero Comandante Hugo Chávez. Su discurso hecho verbo, su compromiso, su humanismo, su entrega, su firmeza y determinación para lograr los cambios que el pueblo de su amada Venezuela clamaba.
Antes de Chávez su pueblo, el más pobre de los pobres que era una gran mayoría estaba invisibilizado, no existía para las grandes oligarquías, la industria que más ganaba era la que producía comida para perros y no porque habían muchos canes sino porque era lo único que la gente podía comprar para comer, así de dura era la cotidianidad de ese pueblo hermano.
Chávez irrumpe y empieza a reconstruir Venezuela. Con verdadero sentido de urgencia empieza a generar los cambios necesarios para devolverle la dignidad a ese pueblo sumido en la ignorancia, la miseria y la desesperanza.
Chávez se metió en el corazón del pueblo, porque para él no había primeras filas, ni protocolos que hacían de lado a su gente. Recordando a Bolívar, Chávez decía: prefiero los consejos del pueblo que los de los sabios.
Chávez estaba bañado de pueblo y eso le hizo comprender las necesidades de la gente, que si bien eran las más básicas como vivienda y comida, también estaba la necesidad de dignidad y soberanía.
Hoy, a un mes de desaparición, queremos decir que si queremos ser leales a su legado tenemos que entender que la revolución no empieza el lunes a mediodía y termina el viernes a las 4 de la tarde, que ser revolucionario no es cantar Comandante Che Guevara todos los días, que ser revolucionario no es coleccionar camisetas y afiches o salir en las fotos. Que ser revolucionario es ser ante todo humilde, ya lo decía el Che: “debemos aprender de la gran fuente de sabiduría que es el pueblo”.
Ahora más que nunca las derechas extremas acechan, creen que el dolor que vivimos nos ha hecho vulnerables, no han entendido que nuestro amor no es un amor de bobos, es un amor combativo, firme y que estamos alertas a todos sus intentos desestabilizadores, a todos sus intentos de regresarnos al pasado de miseria y opresión, pero también debemos estar alertas porque el imperio y sus aliados infiltran los movimientos sociales, los movimientos de izquierda a través de aquellos mercenarios y rezagos de las partidocracias que con tal de seguir en el poder no les importa la ideología, ni les importa haber sido amarillos o naranjas y ahora ser rojos o verdes, esos son los que boicotean los procesos y tal vez los más peligrosos, porque corrompen y traicionan.
El asumir el compromiso con el legado de ese gigante revolucionario que es Hugo Chávez implica trabajar sin descanso hasta desterrar la pobreza, la ignorancia y la injusticia, implica trabajar unidos por una agenda de país, de región de Patria Grande y dejar a un lado las ambiciones de poder y las agendas personales.
Implica la radicalización de los procesos y la depuración de los mismos, denunciando y desenmascarando a todos aquellos y aquellas que hagan contrarrevolución desde dentro y desde fuera.
Implica perder el miedo y confrontar a los traidores y vendepatrias.
Hay una canción de Alí Primera que dice "perdóneme mi don, yo no sé filosofar, yo me voy con los muchachos carajo, a hacer la revolución" y suena a llamado de atención de que hay que dejar de hablar, dejar de quejarnos y empezar a aportar con soluciones, un llamado de atención a los dirigentes que una vez en los cargos o en los puestos se olvidan que están ahí por el pueblo, y que hay urgencia porque la tarea está enterita todavía, por lo tanto hay que trabajar, trabajar y trabajar. El imperio, las derechas mafiosas no descansan y no trabajan divididas.
Quienes nos decimos de izquierda tenemos que trabajar unidos y dejar de hacerle el juego a la derecha. Tenemos que bajarnos de los altares y bañarnos de pueblo.
Las revoluciones no se hacen desde los escritorios, ni las garantizan los títulos cuando detrás de esa preparación no hay verdadero compromiso revolucionario y convicciones firmes en la construcción de la patria socialista. Entonces dejemos de filosofar y vamos a hacer la revolución en serio, porque hoy más que nunca es necesario vencer!
Hasta la Vida Siempre, Comandante Hugo Chávez!
Chávez Vive, la lucha sigue!
Paulina Eliana