El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, aseguró en una entrevista a la cadena RT que Reino Unido ha gastado 4,5 millones de dólares en la seguridad policial alrededor de la embajada ecuatoriana durante los últimos 10 meses. “Eso es el dinero que deberían haber dedicado al pueblo”, dijo el australiano que ha residido en esa legación en calidad de asilado diplomático en ese lapso.  

La declaración ocurre luego de que el presidente de Ecuador, Rafael Correa, asegurara que no entregará al activista a las autoridades inglesas, que quieren extraditar a Assange a Suecia. En la entrevista, el australiano indicó que Reino Unido se siente comprometido con Estados Unidos y con el resto de países europeos, a quienes acusa de perseguirlo.

Assange enfrenta cargos por delitos sexuales en Suecia, por lo que la fiscalía de ese país requiere su presencia para interrogarlo. Pero el activista, que siempre ha negado las acusaciones, teme que en Estocolmo sea enviado a Estados Unidos, donde enfrentaría cargos de espionaje por la filtración de documentos clasificados.

Sobre Plus D, un buscador que creó WikiLeaks de cables diplomáticos, Assange afirmó que contiene información geopolítica importante.

El objetivo, dijo, es facilitar el acceso a periodistas y público en general de miles de cables diplomáticos del Departamento de Estado.

La reciente filtración de WikiLeaks son los documentos fechados entre 1973 y 1976 cuando Henrry Kissinger era secretario de Estado. Allí se quedó registrado el respaldo de Washington a las dictaduras de la época.