Assange, dispuesto a quedarse 5 años más
A solo un día de cumplirse el primer aniversario desde que el australiano Julian Assange ingresó en la embajada ecuatoriana en Londres, Ecuador y Reino Unido lograron acordar la creación de una comisión de juristas que buscará destrabar el “impasse diplomático” por el caso.
El anuncio fue hecho por el canciller Ricardo Patiño durante una conferencia de prensa en el Instituto de Ingenieros del Reino Unido, una destacada institución ubicada en pleno centro del barrio gubernamental de Westminster, a pocos metros del Parlamento y de la Torre del Big Ben.
La sala, que contaba con cerca de medio centenar de periodistas de todo el mundo, se encuentra frente a las oficinas de la Cancillería británica, donde Patiño se reunió con su colega inglés William Hague.
El canciller ecuatoriano confirmó ante la prensa no solo la creación de dicha comisión, que será conformada en los próximos días y que se reuniría tanto en Ecuador como en Reino Unido, sino también la entrega al Foreing Office (Ministerio de Relaciones Exteriores británico) de una serie de documentos con fundamentos jurídicos para que Londres entregue el salvoconducto a Assange.
“Al final de nuestro diálogo con William Hague hemos planteado la conformación de un grupo de juristas de ambas cancillerías para la búsqueda de puntos de acercamiento entre ambos países. Porque creemos que es absolutamente necesario para que prevalezca la justicia en un caso de conflicto legal, que se encuentre una solución a la necesidad de que los derechos fundamentales del señor Assange sean respetados”, indicó Patiño.
En ese sentido, aclaró que hay “una clara diferencia” entre ley y justicia, que pueden y generalmente están asociadas. “Pero en este caso hay un conflicto legal, y por ello debemos recurrir a las instancias legalmente superiores y en lo definitivo, debemos tratar de que se imponga la justicia”.
“Quiero informarles que ayer en la tarde he visitado al señor Julian Assange, la primera vez que tengo la oportunidad de conversar personalmente con él y nuestra visita ha tenido como objetivo ratificar plenamente que el gobierno de Ecuador mantiene la protección de su condición de asilado a nuestro país”, declaró Patiño junto al cónsul ecuatoriano en Londres, Fidel Narváez.
El resguardo de la policía inglesa a la embajada ha costado cinco millones de dólaresLa sombría sala recubierta en madera oscura, con pinturas de algunos de los ingenieros más famosos de Gran Bretaña, entre ellos un retrato de Isambard Kingdom Brunel, escuchó al canciller ecuatoriano reafirmar: “Nosotros le ofrecemos la protección a Assange por su vida, su integridad personal y particularmente su derecho a la libertad de expresión”.
“El gobierno de Ecuador considera que las razones por las cuales se le concedió el asilo se mantienen y que, por lo tanto, esa circunstancia no cambiará. Nuestra decisión de concederle el asilo político está completamente sustentada en los principios del derecho internacional y particularmente del pacto de Caracas, que hace referencia al tema del asilo político; este acto y la legislación ecuatoriana y nuestra Constitución establecen el principio de no devolución. Esto es que el gobierno ecuatoriano no entregará al señor Assange al gobierno británico ni a ningún otro”, subrayó el diplomático ecuatoriano.
Patiño también subrayó que tras su conversación con William Hague, le manifestó su preocupación por el tiempo que ha pasado Assange en la sede diplomática. “El asilo es una institución jurídica internacional que generalmente tiene una temporalidad breve, esa es la idea del asilo: proteger la vida de una persona o protegerla de una persecución política, durante un tiempo breve, hasta que esa persona pueda acceder físicamente a un territorio en donde esta persecución no pueda ocurrir más. Sin embargo, el señor Assange cumplirá este próximo miércoles un año de estar en nuestra sede, y 10 meses desde que Ecuador le concedió el asilo”, agregó el ministro de relaciones exteriores.
El canciller indicó además que el documento entregado al gobierno británico “expresa los fundamentos jurídicos no solo para que el Reino Unido pueda entregar el salvoconducto, sino para que lo haga”. “Es su obligación como un Estado que reconoce los pactos internacionales sobre los derechos humanos. Más aún teniendo en cuenta que la prolongación del asilo a Assange menoscaba sus derechos fundamentales, contenidos en todos los tratados internacionales que el Reino Unido y el Ecuador han suscrito hasta el momento”.
“En resumen, hemos manifestado que la concesión del asilo político sería inefectiva sino existe el correspondiente reconocimiento del derecho al salvoconducto, en el sentido más favorable a los derechos humanos. Como conoce el secretario de Asuntos Exteriores británico, existe también la clara preocupación del riesgo de extradición ulterior, o deportación de Suecia a los Estados Unidos, que motivó al Ecuador a conceder el asilo político”, indicó Patiño.
Durante su ponencia, el canciller sostuvo que las preocupaciones de Ecuador “se han visto agravadas por los acontecimientos vistos en el juicio contra Bradley Manning y por ello deseamos explorar junto a Reino Unido los mecanismos para evitar que Suecia admita la extradición ulterior o su deportación”.
“Estamos seguros de que Hague conoce los detalles del caso en el que Suecia entregó a las autoridades estadounidenses a un ciudadano egipcio, quien había solicitado asilo y que posteriormente fue deportado a Egipto donde fue torturado, caso ampliamente conocido y difundido en el mundo”, subrayó.
Patiño indicó que si Reino Unido le entrega el salvoconducto a Assange y éste llega a territorio ecuatoriano, “Ecuador se comprometerá a estudiar cualquier solicitud de extradición, sobre la base de la cooperación jurídica que debe imperar entre los estados”.
“Por ello se solicitan garantías del gobierno sueco, que deben incluir la no extradición ulterior o deportación a los Estados Unidos. Nuestros asesores legales creen que no solo es posible sino también apropiado que tales garantías se den. Por lo tanto, estamos abiertos a explorar de nuevo las posibles vías para progresar en esta situación”, aclaró.
Por su parte y consultada por EL TELÉGRAFO, una portavoz de la Cancillería británica afirmó que tras la reunión entre Hague y Patiño de 45 minutos “no hubo una solución concreta” por el caso Assange, aunque aclaró que ambas partes “acordaron mantener los canales de comunicación abiertos”.
“Los ministros acordaron que funcionarios deben establecer un grupo de trabajo para hallar una solución diplomática al asunto de Julian Assange, pero no se ha logrado ningún progreso sustantivo”, destacó la vocera del Foreing Office, que prefirió mantener el anonimato.
“El canciller (Hague) fue claro una vez más en relación a que cualquier resolución deberá estar dentro de las leyes del Reino Unido”, agregó. Hasta ahora, Scotland Yard ha gastado 5 millones de dólares en el operativo de seguridad para impedir que Assange escape de la embajada ecuatoriana, con varios policías desplegados las 24 horas al día en esa sede diplomática.
La presencia policial se vio redoblada además ante la posibilidad de protestas por parte de grupos a favor de Assange.
PREFIERE LA EMBAJADA A LEY DE EE.UU.
El canciller Ricardo Patiño arribó el domingo a Londres y en la tarde de ese día se trasladó a la Embajada ecuatoriana para dialogar con Julian Assange.
En respuesta a una pregunta de EL TELÉGRAFO, narró los detalles de esa conversación mantenida en la dependencia consular del número 3 de Hans Crescent, en uno de los barrios más exclusivos de la capital británica.
“He conversado con él hasta las 4:30 de la mañana. Hemos dialogado largamente sobre la situación que está viviendo. Me ha dicho que está muy bien de ánimo. Yo le he manifestado mi preocupación sobre el deterioro de su salud. Me ha dicho que está bien de ánimo, pero no me ha contestado sobre su salud”, sostuvo Patiño.
“Me ha dicho que tiene suficiente fuerza para sostenerse por al menos cinco años en nuestra embajada si es que no recibe el salvoconducto. Me parecería una situación de absoluta injusticia que tenga que pasar más tiempo en nuestra embajada”, agregó.
Patiño contó que Assange le dijo “que prefiere estar aquí (en la embajada) antes que estar en el sistema judicial norteamericano, antes de enfrentar la posibilidad de ser condenado por delitos y de que los procesos que han ocurrido con otros ciudadanos estadounidenses lo puedan hacer con él”.
“Me dijo que teme que la afectación a su integridad personal quede en peligro. Prefiere permanecer en la sede diplomática donde sostiene que lo tratan con respeto antes que someterse al sistema judicial norteamericano. De tal manera, también es escéptico de que la decisión británica pueda ser tomada pronto, aunque nosotros insistiremos diplomáticamente en conseguirlo”, concluyó el ministro de Exteriores ecuatoriano.
“La alternativa de llevar esto a los tribunales internacionales se mantiene, por supuesto. Nosotros insistimos en encontrar una salida diplomática, creemos y por eso hemos presentado el documento de sustento jurídico. Hay condiciones, legislación y convenciones internacionales que permiten perfectamente, plenamente, sin violar ninguna normativa internacional al gobierno del Reino Unido conceder el salvoconducto. Por eso insistimos en ello. Pero el documento que hemos entregado hoy es absolutamente claro, tiene toda la fundamentación jurídica para que el Reino Unido entregue el salvoconducto. Y por eso también hemos sugerido la conformación de una comisión de juristas y encontrar una alternativa. Si la comisión no llega a un acuerdo, analizaremos nosotros. Por lo pronto nuestra decisión es firme, de sostener la situación de Assange. Allí decidiremos si es tiempo de recurrir a un tribunal internacional o todavía insistir en una salida diplomática”, sostuvo el canciller Patiño.
“El tema tiene que ver con principios más que con paciencia y los principios a uno le permiten toda la paciencia del mundo. Estamos defendiendo el derecho a la vida, a la integridad personal de un ciudadano, y eso es más valioso que cualquier tiempo. Cuando uno actúa con principios, puede tener todo el tiempo del mundo. Y así se lo hemos dicho a los señores Hague y Assange. Ojalá se encuentre una salida”.