Londres, Inglaterra.-

La embajada de Ecuador en Londres señaló que existe un “paralelismo claro” entre los casos de extradición del “hacker” británico Gary McKinnon y de Julian Assange, alojado en el consulado sudamericano desde junio pasado.

Así lo dijo un portavoz de la embajada tras conocerse que el pirata informático Gary McKinnon, reclamado por las autoridades de EE.UU. tras haber accedido a ordenadores del Gobierno en 2001 y 2002, no será extraditado a ese país.

En una declaración parlamentaria, la ministra británica de Interior, Theresa May, informó  que había decidido no extraditar a McKinnon por razones humanitarias, puesto que padece el síndrome de Asperger (una forma de autismo) y había riesgo de que pudiera suicidarse si era entregado a EE.UU.

Una decisión “de sentido común” que se ha basado, según el funcionario ecuatoriano, en el artículo 3 de la Declaración de los Derechos Humanos, que prohíbe la tortura y el tratamiento denigrante. El portavoz concluyó que “hay un paralelismo claro con los miedos expresados por Julian Assange”, y pidió al Gobierno británico que diga “públicamente” que “no permitirá, bajo ninguna circunstancia, su extradición a EE.UU., donde se socavarían sus derechos humanos al igual que hubiera ocurrido con los de Gary McKinnon”.

“Paz” con Anonymous

Assange emitió en Twitter un comunicado de prensa en el que desmiente la información difundida en días anteriores en la que se hablaba del fin de la relación amistosa entre WikiLeaks y Anonymous.

Assange afirma en su comunicado que el FBI se ha infiltrado en algunos grupos y cuentas en redes sociales de Anonymous, difundiendo información “falsa y creando confusión”. La semana anterior se difundió en Twitter un mensaje supuestamente de los líderes de Anonymous  que decía que se ponía fin a la relación amistosa con WikiLeaks por empezar a “prostituir la información”.

Esta “decisión” fue tomada luego de que WikiLeaks empezara a cobrar por poder acceder a los contenidos secretos en su poder en una búsqueda de obtener fondos, luego del bloqueo económico que ha sufrido. Assange recordó que Anonymous no tiene un líder, sino que son hackers unidos por la libertad de expresión.