Temprano en la mañana la tranquilidad de la Embajada ecuatoriana, en Londres, se interrumpió. El alboroto ocurrió cuando Julian Assange, fundador de WikiLeaks y uno de los mayores “enemigos” de Estados Unidos, llegó al lugar para pedir asilo diplomático a  Ecuador. Y allí se quedó hasta que el Gobierno le diera una respuesta.

De esta manera cristalizó el anuncio hecho dos años atrás cuando, dijo,   analizaba solicitar protección a un país sudamericano. Ahora se supo que ese era Ecuador.

En Quito, la noticia la dio  el ministro de Relaciones Exteriores, Ricardo Patiño, durante una rueda de prensa en el Palacio de Najas.  

En su intervención, Patiño se limitó a leer una carta que dirige Assange al presidente Rafael Correa. “La posibilidad de ser entregado a  Estados Unidos por autoridades británicas, suecas o australianas, hacen que busque en territorio ecuatoriano el asilo político y la protección para continuar con mi misión porque es un territorio de paz y comprometido con la justicia”, explica el activista en la misiva.

Agrega que “habiendo cumplido con los requisitos formales que manda la legislación de su país, y otros instrumentos regionales de derechos humanos, dirijo la solicitud de asilo político,  pido que la decisión me sea comunicada a la mayor brevedad”.

Assange considera que existe un abandono por parte de su país natal: Australia. “Declaran que no defenderán ni aún mis garantías mínimas ante ningún gobierno y delegan en la Constitución de un país extranjero (EE.UU.) que aplica la pena de muerte por el delito de espionaje”.

Assange está implicado en un proceso judicial que involucra a varios países. Él nació en Australia, pero reside en Reino Unido. Ante las autoridades de este último Estado, Suecia pidió su extradición ya que allá se lo busca por supuestos delitos sexuales. También está inmerso EE.UU. que lo persigue por la filtración de documentos reservados.

Ante esta situación, Patiño explicó que  Ecuador se encuentra evaluando el pedido de asilo y que actualmente está en la Embajada ecuatoriana en Londres.

Eso fue confirmado en un comunicado por la representación diplomática en la capital inglesa.
El texto cuenta que el fundador de WikiLeaks se presentó en la tarde para entregar, personalmente, la solicitud de asilo.

“Como firmantes de la declaración universal de derechos humanos de la ONU, con la obligación de revisar todas las peticiones de asilo, hemos pasado su petición de forma inmediata al departamento competente en Quito”, indicó la Embajada ecuatoriana.

El comunicado añade que  “la decisión de considerar la petición de asilo de Assange no debe ser interpretada de ninguna manera como una interferencia del Gobierno de Ecuador en los procesos judiciales en el Reino Unido o Suecia”.

La organización WikiLeaks también confirmó en su página de Twitter que Assange “está bajo la protección de la Embajada ecuatoriana en Londres” y ha solicitado asilo político.

Desde Londres,   Assange agradeció al  Gobierno ecuatoriano y a su embajadora en  Reino Unido, Ana Albán, por examinar la solicitud. “Puedo confirmar que hoy (ayer) he llegado a la Embajada de Ecuador, donde busqué un santuario diplomático y asilo político. Esta solicitud ha sido transferida al Ministerio de Relaciones Exteriores en la capital, Quito”, declaró en un comunicado difundido a la prensa. “Estoy agradecido a la embajadora de Ecuador y al Gobierno de Ecuador por considerar mi solicitud”, agregó.

La solicitud de asilo ocurre cinco días después de que el Tribunal Supremo del Reino Unido rechazase reabrir el caso de Assange  y diese vía libre a su extradición a Suecia por supuestos delitos sexuales, algo que el activista ha negado siempre.

Los abogados de Julian Assange temen que, una vez en Suecia, él sea entregado a Estados Unidos para ser juzgado por traición. Por eso, la única alternativa legal que le quedaba era presentar un recurso ante el Tribunal de Estrasburgo, un juzgado supranacional europeo.

En Ecuador la única autoridad que se pronunció fue Patiño. Minutos después del anuncio, el canciller viajó, en compañía del presidente Correa, a Brasil para participar en la cumbre Río+20.

Sin embargo, hay antecedentes a la solicitud de asilo político. En noviembre de 2010, cuando recién salían a la luz los cables de Estados Unidos filtrados por WikiLeaks, el entonces vicecanciller ecuatoriano, Kintto Lucas, ofreció protección a Assange.

Ese ofrecimiento fue descartado posteriormente por los superiores de Lucas.

Así quedaron las cosas y el proceso judicial contra el australiano siguió, mientras él guardaba prisión domiciliaria.
Correa y Assange nunca habían tenido contacto hasta el 22 de mayo de este año. Ese día el activista entrevistó al mandatario ecuatoriano en un programa especial que hizo para la televisora pública Rusia Today. El espacio se llamaba “El mundo del mañana”.

En ese diálogo, que abarcó el rol de los medios de comunicación y el papel hegemónico de Estados Unidos en el mundo, Assange se quejó por la falta del debido proceso que se le sigue en Reino Unido.
Esa ha sido la relación que han tenido las autoridades ecuatorianas con Assange, quien fue entrevistado por El Telégrafo el 10 de abril de este año.

Según Luis Narváez, experto en derecho internacional,  el asilo político o la solicitud de refugio no pueden aplicarse a Assange porque existe una imputación penal. “Si es solicitado por las autoridades suecas, ellos deberán garantizar el debido proceso y no atemorizarlo con extradiciones. Si Ecuador quiere colaborar con él deberá hacerlo desde el tema humanitario. No hay otra posibilidad”, acotó.

Ecuador podría conceder asilo desde el punto humanitario a Assange, en base a la Declaración de los Derechos Humanos, pero “los convenios de Asilo Diplomático y Asilo Territorial no defienden al imputado porque son instrumentos exclusivos de la OEA para sus Estados miembros”, aseguró.

Marcelo Fernández de Córdova, experto diplomático, manifestó que no procede el pedido de refugio en el país porque Assange no está en   territorio ecuatoriano, ni es posible el asilo político porque hay una orden de extradición a Suecia por temas penales.