Una decena de países, entre los que se encuentran China, Irán, Alemania, Corea del Sur, Israel o Portugal, experimentan rebrotes de coronavirus en las últimas semanas, lo que les obliga a dar marcha atrás en sus desescaladas y lo que disparó las alarmas sobre la reapertura de fronteras, en pleno debate sobre si realizar pruebas PCR a turistas o exigir cuarentenas a los viajeros.

España, con nueve rebrotes activos, pero “controlados”, según anunció el Ministerio de Sanidad, ya recibió esta semana sus primeros visitantes procedentes de Alemania y abrió ayer sus fronteras con los países del espacio Schengen, también Reino Unido y Andorra, a excepción de Portugal. La frontera luso-española se retrasará hasta el 1 de julio a petición del país vecino, una fecha que coincidirá con la apertura gradual a otros países no pertenecientes a la Unión Europea.

Los casos de coronavirus en el mundo, sin embargo, no dejan de aumentar cada día y ya superan los 8,7 millones de infectados en el mundo y más de 464.000 muertos, lo que supone que al menos una de cada 1.000 personas en el planeta ha contraído la enfermedad, según la Organización Mundial de la Salud.

Aunque la OMS sitúa el principal foco en América, con Estados Unidos y Brasil a la cabeza al superar ambos el millón de casos, pide precaución a todos los países ante los rebrotes a nivel internacional, la relajación progresiva de medidas y el aumento de la movilidad.

Alemania y Portugal son algunos de los países que echaron el freno a sus desescaladas debido a nuevos rebrotes.

Alemania, concretamente, anunció más de 1.000 casos positivos por coronavirus en una empresa cárnica en la ciudad de Rheda-Wiedenbrück, provocando el cierre de las escuelas locales. También, un centenar de nuevos casos en Gotinga puso a más de 700 vecinos en cuarentena.

Una empresa de carne en Yorkshire también es un foco de contagio en Reino Unido al detectarse más de 50 casos positivos.

Portugal, por su parte, registró los últimos días el mayor aumento de casos de coronavirus en un mes, con el foco en Lisboa, a pesar de que la epidemia parecía controlada y el país ya caminaba hacia la normalidad.

Estos rebrotes abrieron el debate sobre la apertura a otros países y si, en el caso de hacerlo, se deberían realizar pruebas PCR a los turistas o exigir cuarentenas.

Otra de las zonas donde se localizaron rebrotes es Asia, especialmente China, donde dieron marcha atrás en su desescalada y decretaron un nuevo cierre parcial al detectarse más de 180 positivos en un mercado de abastos de Pekín, después de 55 días sin contagios locales.

Corea del Sur también registró su peor rebrote de coronavirus en dos meses.

Los rebrotes se unen al avance de la pandemia en países como India o Pakistán que ya superan los 200.000 y los 176.000 casos, respectivamente. (I) 

La OMS atribuye nuevos casos al aumento del número de test que se realizan para detectar covid-19.

Nuevos casos en Israel, Irán y Turquía

Las alertas también se dispararon en Turquía que, aunque levantó progresivamente su confinamiento en las últimas semanas, vio cómo los positivos no dejaron de aumentar hasta registrar más de 1.000 casos en un día, según los datos recopilados por la Universidad Johns Hopkins, situándose en más de 186.000 casos desde que comenzó la epidemia.

También preocupa Israel, con una media de 100 casos nuevos al día. El pasado lunes se volvió a retrasar la reapertura de cines, teatros y salas de conciertos en ciudades como Jerusalén o Tel-Aviv, medidas que contrastan con otras zonas del país, donde los primeros israelíes ya comenzaron a viajar a países como Chipre, que reabrió sus fronteras al turismo y aseguró que se hará cargo de los gastos de alojamiento y comida de los viajeros.

Irán, por su parte, podría estar experimentando su segunda oleada de coronavirus, ya que desde el 2 de mayo el número de infecciones no deja de crecer hasta superar las 200.000 infecciones y las 9.000 muertes.

La OMS señaló que “probablemente” este aumento de las cifras sea una mezcla del incremento del número de test que se realizan y de la propagación de la enfermedad y que “puede ser un poco pronto” para determinar cuánto ha contribuido el Ramadán o la decisión de relajar algunas restricciones. A pesar de este panorama, el presidente Rohaní reconoció que es necesario reabrir el país para no colapsar la economía. (I)