La Unión Europea y el Fondo presionan a Grecia
Grecia recibió la primera advertencia del Fondo Monetario Internacional (FMI) que amenazó al país heleno de una suspensión de pagos en caso de que tenga retrasos en su plan de ajuste y privatizaciones.
La Unión Europea (UE) llegó después al exigir a la nación europea que cumpla con sus metas para reducir el déficit si quiere recibir los fondos internacionales pactados.
Todo esto generó que las bolsas de ese continente cerraran ayer con fuertes pérdidas, arrastradas de nuevo por las dudas sobre la situación de Grecia, después de que el Ecofin no pudo llegar a un acuerdo relevante sobre las ayudas.
La bolsa que más pérdidas registró fue Milán, que cayó el 3,17%, mientras que París se dejó el 3%, Fráncfort, el 2,83%, Londres, el 2,03%, y Madrid, el 1,98%. El índice Euro Stoxx 50 bajó el 2,93%.
Un persistente retraso en el programa de privatizaciones en Grecia puede conducir al país a una suspensión de pagos de su deuda, advirtió el representante permanente del FMI en Grecia, Bob Traa.
“Las privatizaciones ya tienen retraso respecto al programa, ya que los políticos no se pueden poner de acuerdo sobre la forma de proceder”, declaró el representante del Fondo Monetario Internacional (FMI), uno de los tres grandes acreedores del país con la Unión Europea (UE) y el Banco Central Europeo (BCE).
“Si se espera más (...), el país puede ir a una suspensión de pagos” de su enorme deuda, agregó Traa.
El programa de privatizaciones griego suma 50.000 millones de euros de aquí a 2015, de los cuales 5.000 millones serán entregados antes de fin de este año.
Según Traa, las privatizaciones no solamente suponen un cambio de gestión del sector público al privado, sino también aportan capitales y conocimientos para “irrigar” al país cuyo “electrocardiograma se parece al de un hombre muerto”.
La Unión Europea también planteó sus exigencias a Grecia. “No pedimos más que lo que fue acordado en el marco del programa para Grecia, no hay más medidas de austeridad sobre la mesa, lo que está sobre la mesa es el pleno respeto de las metas fijadas”, declaró el portavoz de Asuntos Económicos de la Comisión Europea, Amadeu Altafaj.
La Comisión reclamó la puesta en marcha del programa completo acordado con Atenas para reducir el déficit entre este año y 2012 y los principales acreedores (UE, FMI) de la deuda helena en estos momentos “evalúan si el país va por buen camino”.
Justamente, de los resultados de esta evaluación depende el retorno o no de la troika, compuesta por la Comisión, el Banco Central Europeo (BCE) y el FMI, al país con el fin de dar el visto bueno para el desembolso de 8.000 millones de euros, el último tramo del paquete de 110.000 millones de euros acordado en 2010.
La troika suspendió su misión en Grecia al considerar que Atenas no había cumplido con las reformas del sector público y con el calendario riguroso de privatizaciones.
El duro plan de reformas asfixia a la población griega, agobiada por más y más medidas de austeridad y previsiones para el crecimiento totalmente desalentadoras, con una caída del 5% para este año, según los últimos pronósticos.
Mientras tanto, Grecia ordenó ayer recabar información sobre aquellas personas físicas o jurídicas que hayan sacado los depósitos bancarios del país por el valor de más de 100.000 euros desde 2009, con el fin de estudiar si esos movimientos aparecen reflejados en sus declaraciones de impuestos.
Una circular del Ministerio de Finanzas ordena a todos los bancos e instituciones financieras que presenten una listas con datos de los depositantes que han enviado más de 100.000 euros al extranjero desde 2009.
El Gobierno pretende de esta forma imponer sanciones y tributos sobre aquellos que evadan impuestos en el extranjero. Con esta medida se pretende aumentar los ingresos del Estado.