Cientos de personas se manifiestan en Madrid contra preacuerdo UE-Turquía
Cientos de personas se manifestaron este miércoles en el centro de Madrid para mostrar su repulsa al preacuerdo sobre refugiados entre la Unión Europea y Turquía, que consideraron "ilegal e inmoral".
Los manifestantes, convocados bajo el lema "Contra un acuerdo ilegal e inmoral", mostraron pancartas en las que se podía leer "UE: vendemos armas y echamos a víctimas" y "¡Ni guerras, ni fronteras!" o mostraban dibujos del niño sirio Aylan, que murió ahogado y cuya imagen dio la vuelta al mundo, rodeado por un alambre de espino con las estrellas de la bandera europea sobre el mismo.
El preacuerdo "es vergonzoso, ilegal y vulnera la Carta Internacional de Derechos Humanos, el artículo 19 de la Carta de Derechos Fundamentales de la UE y la Convención de Ginebra para los Refugiados", afirmó la cantante española Cristina del Valle al leer el manifiesto de la concentración, convocada por asociaciones civiles, sindicatos y partidos políticos.
"Con este preacuerdo el proyecto de construcción europea muestra de nuevo su deterioro con un acuerdo que traslada la crisis de los refugiados fuera de sus fronteras, abandonando los valores y los principios que configuran Europa como un espacio común de libertad, seguridad y justicia", añadió el manifiesto.
"Eso es vender a la gente y traficar con ellos", dijo Elena Sánchez, una jubilada de 70 años, que denunció que "los tienen (a los refugiados) liados de un lado para otro, pisando barro, pasando frío, hambre, calamidades".
"Yo me atrevo a decirles que son asesinos", añadió esta jubilada rodeada por otros manifestantes.
Movilizaciones similares tuvieron lugar por toda la geografía española el mismo día en que todos los partidos políticos en el Congreso de los Diputados consensuaron una declaración institucional en la que piden que España exija el respeto al derecho de asilo y rechace las expulsiones colectivas de refugiados en la cumbre que se celebrará el jueves en Bruselas sobre el tema.
Según el preacuerdo con Turquía, este país frenaría las partidas por mar hacia Grecia y Europa y volvería a acoger a los migrantes que lleguen ilegalmente a Europa.
Por cada sirio que acepte, Ankara enviará hacia la UE a otro sirio de entre los 2,7 millones que se han refugiado en Turquía desde uno de los campamentos de refugiados.
El plan tiene por objeto ordenar las llegadas a Europa y desbaratar las bandas criminales que organizan las peligrosas travesías por mar. (I)