Las industrias y las empresas que registren altos niveles de consumo eléctrico podrán reducir el costo de sus tarifas mediante la instalación de sistemas de microgeneración fotovoltaica.

La Agencia de Regulación y Control de Electricidad (Arconel) aprobó a fines de octubre una regulación que permite viabilizar la utilización de la radiación solar para autoabastecimiento.

Gabriel Salazar, director de Arconel, explicó que esta normativa beneficiará al sector productivo con altos niveles de consumo energético, para que tengan una considerable reducción de sus tarifas mensuales a través de estos sistemas que deberán tener una capacidad máxima de 500 kilovatios (Kw).

Pero no solo los comercios se beneficiarán de esta iniciativa, sino también hogares que por su nivel de consumo pagan mensualmente altos rubros.

“Por ejemplo, si una familia consume mensualmente 2.000 Kw hora al mes y su central produce 500 Kw, solo pagará 1.500 consumidos de la red eléctrica”, explicó el principal de Arconel.

Los interesados en instalar estos sistemas deberán presentar a las empresas eléctricas de cada localidad un estudio para determinar la demanda del servicio y justificar la construcción de su microcentral fotovoltaica.

El funcionario recordó que como apertura al uso de energías alternativas, el Estado liberó de aranceles a los equipos que tienen relación con la generación de electricidad fotovoltaica, lo que abarata los costos para adquirir el equipamiento de las microcentrales.

Aclaró que esta regulación no está orientada a hogares con un promedio de consumo de 200 Kw hora y que pagan alrededor de $20, sino a clientes que consumen más de 2.000 Kw y pagan desde $ 300.

Este tipo de consumo se encuentra principalmente en la Costa por el uso ininterrumpido de acondicionadores de aire, iluminación exterior, piscinas.

Juan Bermeo, gerente de la empresa EcoCaucho, considera positiva la iniciativa, pues abre el camino para que el país continúe con la implementación en su aparato productivo de energías limpias, sustentables y alternativas.

“Como empresa que cree en la necesidad de proteger nuestro medio ambiente, estamos dispuestos a implementar una de estas plantas fotovoltaicas, lo que requiere que hagamos un análisis técnico para evaluar las áreas que podrían conectarse con esta energía”, manifestó el empresario.

De su lado, Juan Ortega, empresario de la industria gráfica, considera que esta iniciativa traerá beneficios al sector empresarial, pero que se debe analizar la calidad de las plantas que se construirían, la calidad de materiales, el tiempo de vida útil, pues se necesitan inversiones para su implementación.

Esperan que el ente regulador socialice la medida y entregue mayor información que permita a los empresarios tomar una decisión al respecto.

Para Héctor Garzón, presidente de la Federación Ecuatoriana de Industrias de Metal (Fedimetal), el uso de una planta fotovoltaica con la capacidad de 500 Kw es insuficiente para el nivel de consumo y potencia de este sector, que es hasta 60 veces superior a lo estipulado por Arconel.

Considera que la planta fotovoltaica podría ser utilizada para la iluminación exterior de las fábricas. (I)