La pandemia de la covid-19 sin duda alguna ha traído consigo muchos eventos desafortunados como el cierre de empresas, disminución de producción, pérdida de empleos y sigue amenazando la estabilidad de otras tantas que se resisten a perderlo todo.

Los emprendedores forman parte del grupo que se encuentra en los dos extremos, es decir, o han tenido que cerrar sus negocios o han visto una oportunidad en medio de la pandemia, ya sea por la entrega de servicios y bienes a domicilio, venta de insumos médicos, indumentaria sanitaria y demás.

Para Juan José Estrada, analista económico y emprendedor, este sector es el más afectado en medio de pandemia. Muchos han tenido que cerrar sus negocios y “posiblemente no se abrirán por un buen rato o tendrán que replantearse su modelo de negocio”.

Sin embargo, considera que con la apertura que brinda la semaforización y las disposiciones de las autoridades, poco a poco se intenta “volver a la normalidad”, una normalidad que según dice, no debería ser igual que la anterior.

“Creo que este tiempo de pandemia también nos ha enseñado que estábamos haciendo algunas cosas mal. Creo que los negocios deben si o si buscar la manera en tener un plan B y C ante emergencias”, comenta.

Cree que solo las empresas bien organizadas son las que han tenido éxito en estos momentos de paralización comercial. “Nos hemos dado cuenta que necesitamos en este era un personal altamente calificado en tecnología, logística y atención al cliente, todos estos apoyados con recursos tecnológicos”.

Criterio que comparte Miguel Ángel Mera, joven emprendedor y especialista en big data, quien asegura que “todos, absolutamente todos los negocios se han apoyado en la tecnología para comercializar sus bienes y servicios”.

Pero además del soporte tecnológico, logístico y de atención que debe tener está también la imagen y el mensaje que transmite a sus clientes.

Josefina Palacios, especialista en branding empresarial, asegura que en ninguna de las etapas de la empresa, sea cual sea su tamaña y en especial las nacientes, se debe perder el desarrollo y mantenimiento de los atributos y valores inherentes a la marca que es lo que hace que se identifique con su público.

“En las últimas semanas hemos visto cosas inauditas, empresas que nos están sorprendiendo positiva y negativamente. Es una experiencia durísima y las acciones cuentan más que las palabras. No es el momento de arriesgar haciendo promesas falsas”.

La experta aconseja que a las nuevas empresas o emprendimientos que se mantengan fieles a su identidad de marca, ofreciendo a los clientes la oportunidad de sentirse siempre cómodos y satisfechos. “Un cliente satisfecho siempre vuelve”. (I)