Es la Primera temporada que corre por Pichincha
Villavicencio es el amo de las metas volantes
Antes del arranque de la XXXIV Vuelta Ciclística al Ecuador, José Antonio Ruiz, integrante de la Concentración Deportiva de Pichincha (CDP), destacó la velocidad de la delegación y adelantó que uno de los objetivos sería luchar por liderar las metas volantes.
Esta última afirmación la plasma su compañero de equipo David Villavicencio. De los 35 puntos posibles en las siete metas volantes de las tres primeras etapas, el ibarreño alcanzó 30 y lidera con comodidad esta categoría que le permite vestir la camiseta de puntos blancos y verdes en lo que va de la prueba.
“Tenemos hombres bastante fuertes y rápidos, sobre todo en el llano, y aprovechamos esa condición para puntuar en metas volantes y también luchar por ganar etapas”, comentó el deportista de 23 años, justo después de la victoria de su compañero de equipo José Bone en el circuito de 72 kilómetros en la localidad de La Concordia.
Los 19 puntos de ventaja sobre su perseguidor, Sebastián Rodríguez (Movistar Team Ecuador), luego de la tercera jornada, le dan un impulso adicional para mantener ese ritmo y continuar con la suma de puntos, pero no se confía. “Nada está dicho aún. Queremos ganar todo lo que sea posible en el llano para que cuando llegue la montaña no nos veamos sorprendidos”.
Al momento de una meta volante, como las dos que hubo ayer en la etapa entre La Concordia y Canoa (189,6 kilómetros), los integrantes de la CDP trabajan en equipo. “El viento juega un papel importante en las competencias. Todos se enfilan y desgastan al que va adelante y así el que está atrás descansa antes de rematar e ir más rápido”, explicó el deportista imbabureño.
Dominar los ‘sprints’ no es un trabajo al azar, ya que para ello se preparan durante todo el año con la agrupación de la CDP. Buscan carreras que les ayuden a mejorar la velocidad, pedalean detrás de una motocicleta o un vehículo y de esa manera las piernas se moldean.
36 meses alejado de su pasión
Por nueve años consecutivos se dedicó de lleno al ciclismo de ruta, pero desde los 18 años paró 3 años. En ese tiempo siempre echó de menos estar sobre una bicicleta porque no montaba ni siquiera por diversión.
Problemas personales y la falta de apoyo -según comenta el deportista- lo alejaron de esta actividad y no tuvo a nadie que lo aconsejara para que se mantuviera activo en el ciclismo. “Tomé esa decisión por falta de madurez, pero siempre estuve pendiente. Veía a mis compañeros en las carreras y no me sentía a gusto al observar desde afuera”. Regresó este año cuando se le presentó una oportunidad para ingresar al equipo de la Concentración Deportiva de Pichincha (CDP) y participar de la Vuelta.
“Vi que había apoyo para retomar este deporte y me decidí”. Ahora en su debut en esta justa ciclística confía en mantener el ritmo en cada una de las etapas y consagrarse el próximo 18 de octubre -clausura de la Vuelta- como el amo de la velocidad sobre los caballitos de acero.