Aún con la pena de quedarse a 47 segundos de clasificar a sus segundos Juegos Olímpicos en la maratón, el atleta ecuatoriano Segundo Jami confía en que podrá bajar su tiempo y acceder a los JJ.OO. en Tokio a desarrollarse del 24 de julio al 9 de agosto.

La Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo impuso como marca mínima para clasificar a la capital japonesa en los 42 kilómetros que los corredores deben alcanzar las 2 horas, 11 minutos y 30 segundos.

El 1 de diciembre pasado, el tricolor registró 2h12m17s en una carrera desarrollada en Valencia (España) en la que parecía que aseguraba su boleto a tierras asiáticas, pero por una pequeña molestia en el pie bajó el ritmo y se quedó a menos de un minuto de lograr su sueño.  

Si bien, el latacungueño de 33 años podría apelar al ranking mundial para poner su nombre en la olimpiada, prefiere asegurarse cumpliendo con el tiempo establecido. 

Algo que intentará en la maratón de Viena (Austria), el venidero 19 de abril.

Jami recibe el apoyo de la Secretaría del Deporte, a través del Plan de Alto Rendimiento en el que se encuentra en la categoría de desentrenamiento, algo en lo que no está de acuerdo porque en la historia de la maratón se encuentra en el cuarto lugar detrás de importantes y retirados atletas como Rolando Vera, Silvio Guerra y Franklin Tenorio, con quien entrenó por unos dos años.

Además de ser actualmente el mejor maratonista del país y estar cerca de participar en sus segundos Juegos Olímpicos, tras los de Río 2016. “Estar en esa categoría es algo decepcionante, pero compito  no porque me den algo, sino por representar de la mejor manera al país y a mi familia”, comentó el deportista.   

Segundo inició en el atletismo cuando tenía 12 años, cuando les ganaba a sus compañeros de la escuela Hermanos Pazmiño. 21 años han transcurrido de aquello y los triunfos se han sucedido en carreras de 10, 15, 21 y 42 kilómetros. En todos estos años la  Cooperativa Cacpeco ha sido su principal apoyo.

A la par del deporte logró titularse como ingeniero en finanzas y auditoría, pero por estar enfocado en el atletismo no ejerce su carrera y mantiene a su familia, gracias a dos negocios que administra en Latacunga y también hace auditorías personales.

En abril Jami dejará todo para conseguir bajar los 47s y clasificarse a Tokio. (I)