La jueza Ximena Rodríguez negó el pedido de prelibertad solicitado por Luis Chiriboga, expresidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF), por lo que continuará en arresto domiciliario por el resto de su condena.

Chiriboga cumple una pena de 6 años por lavado de activos. En julio pasado, en audiencia de casación, la Corte Nacional estableció esa pena y modificó la anterior, en la que estaba sentenciado a 10 años.

Gina Ramos, abogada del extitular de la Ecuafútbol, realizó la petición de acuerdo con el anterior código de ejecución de penas. Las personas que hayan cumplido el 50% de su pena pueden pedir una rebaja.

Chiriboga está en arresto domiciliario desde el 4 de diciembre de 2015, por lo que ya había cumplido la mitad de los 6 años a los que fue sentenciado.

Sin embargo, la jueza argumentó que no se aceptó la solicitud porque Chiriboga cumple prisión domiciliaria y no está detenido en una cárcel. Las personas de la tercera edad tienen ese beneficio, mientras no exista una sentencia en firme.

Ese no es el caso de Chiriboga, pues en julio de este año ya recibió la sentencia en firme. La jueza no se explicó por qué la Corte Nacional no ha realizado las gestiones para que se cumpla lo que dice la ley.

Rodríguez señaló que pedirá que se investigue a los funcionarios judiciales, quienes no han entregado la documentación para que Chiriboga ya no esté en su domicilio y cumpla la sentencia en un centro de rehabilitación.

Chiriboga es uno de los exmiembros de la FEF que fue sentenciado por el caso FIFAGate, que involucró a diversos directivos en varias federaciones del mundo.

Al exdirigente se lo sentenció por lavado de activos, por un monto de más de $ 6 millones que ingresaron a la FEF y que no se pudo justificar de qué forma entraron esos dineros a la entidad.

Además de la pena privativa de la libertad, Chiriboga deberá cancelar una multa económica del doble del valor  de ese dinero, es decir más de $ 12 millones. (I)