El presidente de la Asociación del Fútbol de Argentina (AFA) y vicepresidente de la FIFA, Julio Grondona, murió ayer a los 82 años en una clínica de Buenos Aires. En la FIFA era además presidente de la estratégica Comisión de Finanzas.

El poderoso dirigente, que estaba al frente de la AFA desde 1979, había sido hospitalizado la noche del martes pasado por una indisposición cardíaca y falleció mientras era sometido a una intervención de urgencia en la capital argentina.

Grondona, convertido en el patrón del fútbol argentino durante los últimos 35 años, había sido ingresado en un sanatorio privado capitalino aunque oficialmente se había mantenido a resguardo las razones de su hospitalización.

Esta semana había mantenido al menos 2 reuniones con el DT Alejandro Sabella, quien decidió no seguir en su cargo como entrenador de la selección argentina que se proclamó subcampeona del Mundial de Brasil 2014.

El polémico dirigente llegó a la titularidad de la AFA en 1979, nombrado a dedo por el vicealmirante Carlos Lacoste, presidente del Ente Autárquico Mundial 1978, creado por la última dictadura militar (1976/83) para organizar el máximo certamen del balompié.

Desde entonces fue reelecto cada 4 años, sobrevivió a todos los gobiernos democráticos, cualquiera fuese su signo y todos negociaron con él debido al tremendo poder que acumuló, apoyado casi incondicionalmente por más de 22.000 clubes de todo el país.

Durante su gestión produjo las mayores reformas de la historia del fútbol argentino y la selección ‘albiceleste’ obtuvo el Campeonato Mundial de México 1986, 2 medallas de Oro en Juegos Olímpicos (Atenas 2004 y Pekín 2008) y las Copas América de 1991 y 1993.

Su muerte hizo que se suspenda el campeonato de fútbol local en todas sus categorías; mientras que la presidenta Cristina Fernández decretó 7 días de luto nacional.

Luis Segura, primer vicepresidente de la AFA, asumirá momentáneamente la presidencia.