Independiente del Valle parece acostumbrado a las hazañas y nuevamente tratará de completar otra en la final de vuelta contra Atlético Nacional. El gol de Arturo Mina, cuando el duelo expiraba, le dio una bocanada de aire al equipo ecuatoriano que buscará levantar el título luego de igualar 1-1, ayer en el estadio Olímpico Atahualpa.

La ansiedad de los primeros minutos se notó en una de las primeras jugadas, cuando el uruguayo Mario Rizotto fue con fuerza a intentar robar un balón a Macnelly Torres. El DT Pablo Repetto lo calmó y el central paraguayo Enrique Cáceres lo advirtió.

La llovizna que cayó en los primeros minutos hizo que el gramado se hiciera más rápido. Mientras Repetto acomodaba su paraguas para cubrirse en la zona técnica y Reinaldo Rueda lo hacía con su impermeable, los Angulo combinaron cerca del área: Julio hizo una pared  y José el ‘Tin’ se dio modos para rematar de zurda, con un tiro que por poco sorprendió al golero Franco Armani.   

El agua dejó de caer sobre el sector de El Batán cuando apareció la respuesta del equipo colombiano.

El tridente ofensivo conformado por Orlando Berrío, Miguel Borja y Marlos Moreno empezó a funcionar cuando el primero de ellos se animó a rematar de media distancia, con un tiro envenenado por el pique sobre el pasto mojado, pero que Librado Azcona logró despejar a un costado.

Vamossssss golllll de Nacionallll gol de Berrio!! pic.twitter.com/LVAJYaB3nY

— LINCOLN PALOMEQUE (@LINCPAL) 21 de julio de 2016

Si se habla de los creativos de ambos planteles, Torres se convirtió rápidamente en el eje de su equipo como en otros partidos de los “verdolagas”, por los espacios que le cedieron Jefferson Orejuela y Rizotto. Mientras que del lado de local, Júnior Sornoza tuvo problemas para poder aparecer, pues siempre estaba cubierto ya sea por Sebastián Pérez o uno de los centrales.

Su frustración era evidente porque no podía mostrar su juego y debía descender varios metros para poder tocar el balón. Lo mismo ocurría por la banda izquierda, con Brayan Cabezas, que poco y nada lució con su juego porque era imposible que recibiera con libertad. Más aún arrancar con velocidad.

Lo mismo le sucedió a José Angulo, que fue absorbido en ocasiones por la marca de hasta tres jugadores. Su compañero de igual apellido sí tuvo más desborde por su banda y provocó un tiro libre peligroso. Sornoza lanzó al área y Arturo Mina no pudo rematar bien; lo hizo con el rostro y por poco se le escapa el balón a Armani.

El gol de Arturo Mina 1-1 pic.twitter.com/0ZpnUjuJ2z

— Joselo Sánchez (@SanchezJoselo) 21 de julio de 2016

Pero los estragos del mejor volumen de juego de Nacional afectaron a Independiente en la zona defensiva. Berrío arrancó desde la izquierda y se recortó hacia el centro, sin que los zagueros le pudieran quitar el esférico. Mina se resbaló en la acción cuando estuvo por arrebatárselo y dejó el camino libre para que Berrío rematase desde la media luna. El tiro fue imposible de detener para Azcona (35’).

El grito ensordecedor de los casi 4.500 aficionados colombianos en la celebración se sintió con más fuerza que los fuegos artificiales que se lanzaron antes del inicio del partido. Rueda dejó de lado la tranquilidad que lo caracteriza y festejó con euforia junto a los suplentes y su cuerpo técnico.

Repetto, como en cada acción en la que los suyos se equivocaban, dio la espalda a la cancha y con cara de decepción se dirigió al banquillo. El enojo le duraba poco y no se podía quedar sentado; su lugar estaba en el borde de la zona técnica y volvía a gritar indicaciones a quien tenía más cerca.

No tardó en repetir esa acción, porque en la parte final del primer tiempo uno de los hombres más regulares, Arturo Mina, falló en un despeje y Marlos Moreno disparó con precisión, pero el balón salió apenas desviado y aterrizó en el techo del arco.

Antes, el central esmeraldeño se había deslizado con efectividad para cortar dos ataques veloces de los delanteros de Nacional. Los aplausos no tardaron en cobijar el buen accionar de Mina.

En el entretiempo, las caras en la tribuna eran de decepción y de incertidumbre, pues los aficionados coincidían en que el planteo de Rueda le había resultado a la perfección. Pero también sabían que se volvió como una costumbre que los “rayados” deban pelear con el resultado en contra.

El partido contra Boca Juniors en el mismo escenario vino a la memoria y los optimistas presagiaban una remontada en el segundo episodio. Las marcas colombianas se intensificaron y Torres dejó de aparecer como lo hizo en el primer tiempo.

Mientras que los que casi no asomaron en Independiente, Cabezas y Sornoza, tuvieron mayor protagonismo. Entre los dos hilvanaron una de las pocas jugadas ofensivas, cuando el portovejense filtró un pase para el quevedeño, pero por el apuro no se decidió si centrar o disparar al arco de Armani.

Con el pasar de los minutos y después de un largo diálogo entre Repetto y su asistente, Óscar Quagliata, se decidieron en que debían reemplazar a los aleros. Ni Angulo, ni Cabezas funcionaron como querían e ingresaron Johnny Uchuari y Jonathan González.

Su trabajo era el desborde con velocidad, pero los laterales Daniel Bocanegra y Farid Díaz los tuvieron a mal traer. Las gambetas e intentos de arranques fueron bien contenidos por ambos y los argumentos de Independiente cada vez se fueron quedando sin sustento.

Los “verdolagas” controlaron el partido, pero en el tramo final no pudieron contener los embates del local. Todo parecía indicar que la victoria sería colombiana, pero los locales no bajaron los brazos y de cualquier manera pretendían al menos el empate.

El tanto llegó con algo de desesperación y sin tanta planeación. Sornoza, a 3 minutos del final, levantó un tiro libre al área, Mina se elevó pero no impactó el balón y eso confundió al arquero. Armani pudo sacarlo, con tal mala fortuna que nuevamente el central pudo empujar a la puerta vacía.

El tanto que le da vida a Independiente llegó de los pies de uno de sus mejores hombres. Ahora el ‘negriazul’ deberá luchar y cerrar la serie para definir al campeón en Medellín el próximo miércoles.

El equipo ecuatoriano además pudo mantener el invicto como local y terminará la Copa sin perder en Quito. (I)

Angulo sufrió  un esguince  de tobillo

El delantero de Independiente del Valle, José Angulo, dejó el campo de juego entre lágrimas y lamentos luego de que Elkin Blanco -del Atlético Nacional- cayera encima de su tobillo izquierdo, provocándole un fuerte dolor.

Tras la acción el cuerpo médico del club ingresó a la cancha para atenderlo y luego de una primera valoración se procedió a solicitar el cambio.

Las imágenes de televisión mostraron a ‘Tin’ Angulo frustrado y con lágrimas, sentado en la banca de suplentes. Los médicos procedieron a colocarle hielo en la región afectada para que la lesión no se complicase.

“Me asusté mucho porque al momento que se me dobló la pierna sentí mucho dolor, fue fatal”, dijo Angulo, tras ser entrevistado por Fox Sports.

Édison Logroño, uno de los galenos del club, confirmó que Angulo solo sufrió un esguince en su tobillo izquierdo, pero que hoy se le realizarán todos los exámenes médicos respectivos para determinar su gravedad y el tratamiento a seguir.

Pablo Repetto, DT del Independiente, confirmó la lesión de Angulo, pero a diferencia del médico no quiso dar detalles de la misma hasta conocer el resultado de los exámenes. Sí reveló que siente preocupación ante una posible ausencia del goleador.

Pero tras la primera valoración médica, se dijo que el ‘Tin’ Angulo solo necesitaría aplicarse hielo y descanso para llegar a la final de vuelta en el Atanasio Girardot.

El mismo jugador, tras el susto, aseguró que sí estará en el encuentro de vuelta que se disputará el próximo 27 de julio en la ciudad de Medellín, dándole un poco de tranquilidad a compañeros y técnico.

Angulo está valorado en un millón de dólares, según el sitio web especializado en traspasos, Transfermarkt. En la presente edición de la Copa Libertadores de América ha jugado todos los 15 encuentros (1.262 minutos), marcó seis tantos y recibió solo una tarjeta amarilla.

Por otra parte, Luis Caicedo y Mario Rizotto se sumaron a Arturo Mina en acumular su primera cartulina amarilla, por lo que el equipo ecuatoriano no tendrá bajas en Medellín. (I)