La selección argentina está a la deriva. Sin Lio Messi tras su mediática renuncia a raíz de la final perdida en la Copa América Centenario ante Chile, ahora fue el turno del técnico, Gerardo Martino. El “Tata” dijo basta cansado de tantas desprolijidades. Su reemplazante es toda una incógnita.

“Debido a la indefinición en la designación de nuevas autoridades de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y de los graves inconvenientes para conseguir conformar el plantel que represente al país en los próximos Juegos Olímpicos, el cuerpo técnico de la Selección ha decidido presentar su renuncia en el día de la fecha”, dice una nota oficial  publicada en el sitio de la entidad.

La crisis es tan grave que está en riesgo la participación del seleccionado argentino en Río 2016, a menos de un mes de su inauguración. Los equipos argentinos se negaron a “prestar” jugadores y las grandes figuras internacionales, como Paulo Dybala, de la Juventus, no recibieron el permiso de sus clubes. “Hay 50 por ciento de chances que la selección argentina no presente equipo”, dijo Gerardo Werthein,  presidente del Comité Olímpico Argentino.  Los entrenamientos, ya postergados una vez, deberían comenzar el lunes próximo.

Martino venía acumulando bronca. Estuvo seis meses sin recibir su salario, en medio de una crisis sin precedentes en la Asociación del Fútbol Argentino, jaqueada por agujeros financieros, un presidente como Luis Segura procesado por irregularidades en la justicia y una intervención decidida por la FIFA.

La renuncia de Messi, que en los últimos días fue perdiendo fuerza en sus allegados que vaticinan su regreso tal vez después de un “año sabático”, fue un duro golpe para Martino. Sin embargo, la AFA lo había ratificado en el cargo tras la nueva frustración de la Copa América y el técnico comenzó entonces a delinear el equipo para las Olimpíadas.

Pero los jugadores se le fueron cayendo uno tras otro por la negativa de los clubes argentinos y europeos de prestar a sus figuras para Río 2016, como Dybala, de la Juve; Mauro Icardi, del Inter; Mateo Musaccio, del Villarreal o Emanual Mammana, del Lyon.  El local Independiente de Avellaneda se negó a autorizar a tres de sus futbolistas a sumarse al plantel. Martino contaba con solo 12 futbolistas.

El técnico se reunió este martes en el predio de la AFA en la localidad bonaerense de Ezeiza con su vicepresidente,  Claudio “Chiqui” Tapia, para buscar señales que le permitieran seguir en el cargo.  Pero las respuestas no lo conformaron y dio un paso al costado a menos de un mes del inicio de los Juegos y con las eliminatorias al Mundial de Rusia 2018 a la vuelta de la esquina. La albiceleste deberá enfrentar a Uruguay y Venezuela en septiembre, seguramente sin Messi y ya con nuevo técnico.

Pero además el delantero Sergio “Kun” Aguero avisó que otros jugadores podrían seguir el mismo camino que el crack del FC Barcelona. En los últimos días allegados al astro dejaron entender que Messi volverá a la selección, pero la renuncia de Martino suma un nuevo inconveniente. Ahora los fanáticos temen que esta inesperada dimisión del técnico retrase varios casilleros el deseo general de que “Lio” vuelva a vestir la camiseta albiceleste.

Ya durante la Copa América, en vísperas de la final que Argentina perdió por penales ante Chile, Messi mostró en las redes sociales todo su enojo contra la AFA  por el retraso de un vuelo, la gota que rebalsó el vaso ya que en realidad se debió a un problema meteorológico. ”Qué desastres que son en la AFA por Dios”, escribió en las redes sociales. El futbolista venía acumulando bronca con los dirigentes por varias desprolijidades vividas durante el torneo, como practicar con un equipo juvenil de una universidad de California que incluyó a tres mujeres. Ahora, lo siguió Martino.

El entrenador había asumido el cargo el 22 de agosto del 2014. En los 22 meses en que llevó las riendas de la selección, desde su debut con victoria 4 a 2 ante Alemania en Dusseldorf, dirigió 29 partidos, con 19 triunfos, 7 empates y 3 derrotas. Y fue subcampeón de la Copa América en las ediciones de 2015 y 2016. En ambas ocasiones cayó por penales en la final frente Chile.