Los reclamos de jugadores y técnicos hacia los jueces por alguna decisión no restaron brillo al triunfo logrado por el quinteto de la Universidad Tecnológica Equinoccial sobre su similar del Guerreros del Neumane por 102-71, en la antepenúltima fecha de la primera fase de la Liga Ecuatoriana de Básquet.

La temporada anterior ya contó con el concurso de jueces extranjeros y para la presente edición la Comisión de la Liga Nacional de Baloncesto, con el afán de fortalecer el desarrollo del certamen, resolvió la contratación de tres jueces extranjeros para la dirección de los encuentros, más aún cuando son tres árbitros en cancha.

A los jueces ecuatorianos Flavio Zabala, Humberto Muñoz, Omar Parrales, Ricardo Encalada (internac ionales); René Coronel, Jorge Coronel, Roberto Carrión, Daniel Yépez, Jorge Campaín y Kléber Tigreros (nacionales) se suman los extranjeros Sammy Maldonado, Jhony Joubert (Venezuela) y Patricio Menares (Chile), quienes vienen de actuar en distintas plazas del país.

Aunque a veces son víctimas de insultos por parte de los aficionados desde los graderíos, su labor tiene especial importancia para el desarrollo del torneo y del espectáculo.

“Vale la pena traer jueces extranjeros, porque no tenemos el número suficiente de árbitros calificados en el país para este nivel, son pocos los árbitros extranjeros, pero siempre traen algo de experiencia y conocimientos como para respaldar al arbitraje nacional”, comentó Patricio Pozo, presidente de la Comisión de la Liga Ecuatoriana de Básquet.

Los tres jueces foráneos serán los encargados de llevar a efecto clínicas de baloncesto para jueces nacionales y transmitir sus experiencias y conocimientos, sin desconocer que Ecuador también cuenta con buenos árbitros. Pozo afirmó que el arbitraje no ha sido malo, pero siempre hay errores “que los inconformes  atacan, pero sí es un acierto haber traído jueces extranjeros”.

En contraposición, Marcelo Oquendo, ex árbitro internacional ecuatoriano, con 25 años de experiencia, retirado de la actividad hace algún tiempo, no está de acuerdo con  la presencia de jueces de otros países. “ Me da mucha pena que se haya marginado a los jueces ecuatorianos y realmente no veo ninguna ventaja para el espectáculo, porque los árbitros que han traído son ellos quienes quieren ser el espectáculo y eso está mal”, opinó.

Recalcó que antes de su retiro se implantó la norma de la ventaja y desventaja, en relación con el jugador que lleva la pelota, y necesariamente se tiene que esperar la posesión... esos son, según Oquendo, errores que se cometen con cierta frecuencia.

Al reconocer que no existe un buen número de árbitros ecuatorianos, eso puede ser, dijo, una justificación para contratar jueces extranjeros, pero se debería priorizar a los nacionales.

Juan Posé Pidal, técnico argentino que presta sus servicios en la UTE, expresó que los árbitros han tenido aciertos y desaciertos, pero es parte natural de su trabajo y no hay que hacer un problema por ello. “A veces los criticamos mucho, como también a los entrenadores, pero el arbitraje (con estas medidas) puede mejorar mucho más y, asimismo, nosotros  nuestro juego”. (FMR)