Noa Wildschut es una prodigiosa violinista holandesa que desde los 15 años  cuenta con su primer disco bajo el sello de la Warner Classics (marca de la que es exclusiva) y es miembro de la Mutter Virtuosi, dirigida por la violinista alemana Anne-Sophie Mutter.

No en vano ha construido una reputación basada en la interpretación de importantes sinfonías del género clásico en recitales que ha ofrecido en Alemania, Francia, España, Suiza, Estados Unidos, Canadá, Reino Unido,  Brasil y otros más.

Su llegada a Ecuador es por una invitación que le propuso el maestro Dante Anzolini, director de la Orquesta Sinfónica de Guayaquil, hace un año. La hizo a su padre, quien dirige su carrera, para que forme parte de la lista de invitados que se han presentado en el “Ciclo Solistas Internacionales”.

Este viernes, a las 19:30, en el Teatro Centro Cívico Eloy Alfaro, el  público podrá  escuchar los sonidos de su violín en las piezas “Fantasía Escocesa”, Op.46, de Max Bruch, más “Le Tombeau de Couperin” y “Ma Mère l’Oye”, de Maurice Ravel.

La holandesa Noa Wildschut interpretará piezas de Max Bruch y Maurice Ravel este viernes 28 de diciembre, a las 19:30, en el Teatro Centro Cívico.

Mirada a lo social
Pero más allá de su exposición y participación con  grandes orquestas, desde los 4 años, el anhelo de Noa en la actualidad es llevar el género  clásico a lugares periféricos de los países que visita.

Justamente esa fue la condición por la que aceptó la invitación de Anzolini, que paralelamente, y con el aval de la Presidencia, construye un proyecto social para llevar a la orquesta a presentarse en  barrios marginales del país.

“Voy con la condición de tocar en los suburbios, maestro”, le dijo la joven becada por la Fundación Anne-Sophie Mutter a Anzolini.

“Le contesté: ‘fenomenal’, porque justamente quiero llevar la orquesta al suburbio de Guayaquil, entonces no solamente tocaremos el viernes en el teatro, sino que el jueves la llevaré a Monte Sinaí a la iglesia El Bautismo de Jesús, que me consiguió el maestro Jorge Layana, el primer oboe de la Sinfónica”, manifiesta el director del recital que será a las 16:30.

La presentación de Noa en este templo no tendrá el tono solemne de un recital común, sino que incluirá una charla de sus experiencias que compartirá con menores  de nivel escolar y colegial.

El director recalca que adicional a los invitados de Monte Sinaí se sumarán jóvenes del Guasmo, Isla Trinitaria y Bastión Popular.

“Cuando yo tenía la edad de estos chicos no había la droga que hay actualmente, pero me interesa rescatar a esta gente que ahora es adolescente. Lo que quiero es llevar el ejemplo de ella, que  cuente su historia, no va a ser un concierto sino una charla donde vamos a tocar”, asegura el ítalo-argentino que acompañará con el piano a Wildschut en este recital.

Cuenta que esta presentación marca el inicio de una serie de conciertos que el próximo año hará con más artistas internacionales.

“La música en tiempos de paz es un arma letal, te puede llevar a concebir y hacer cosas compartidas sin ningún  problema, y con un objetivo común que es la felicidad de la gente. Se puede usar la música como instrumento de conocimiento y cultura”, sostiene Anzolini.

Proyectos de la Orquesta
En febrero de 2019 concluirá   el ciclo de conciertos que la Orquesta Sinfónica de Guayaquil planificó, pues en marzo se irán de vacaciones.

El director anticipó que la agenda del próximo año incluye la participación de dos docentes invitados de la Universidad de Nuevo México, quienes serán acompañados por la orquesta y se presentarán en el Centro Cívico.

“El truco más lindo es que esta gente, como es docente  de esta entidad, tiene la posibilidad de otorgar becas a jóvenes ecuatorianos”, añade.

Sin revelar sus nombres, dice que estos maestros también irán a  barrios como Isla Trinitaria, Bastión Popular y otros para compartir sus experiencias. Las fechas y sitios aún no están definidos.

Para el nuevo año, tres producciones están previstas. En abril, Anzolini presentará una traviata con su colega Dennys Giauque.

En septiembre, en cambio, están planificadas dos óperas. La Cavalleria rusticana, la cual fue la última presentación que presidió el maestro Angello Negri, quien falleció en el podio dirigiéndola.

Y la ópera cómica Gianni Schicchi, una versión con música de Giacomo Puccini, que se narrará con sonidos sinfónicos. (I)