El museo de la ciudad avanza su construcción a buen ritmo. La infraestructura física y las instalaciones eléctricas presentan un avance de 90%.

Están pendientes los trabajos de acabado, arreglo de accesos -pensado en las personas con capacidades especiales, adultos mayores, entre otros-. También se trabaja en la adecuación de oficinas, bodega y contenedores.

A decir de la persona encargada de la obra, el espacio estará listo en agosto de este año. Probablemente, el museo se abra al público en el marco de las fiestas de cantonización de Portovelo.

Paralelamente se trabaja en el guion museográfico inaugural, así como en las líneas estéticas por las que optará como política institucional.

La infraestructura del lugar es una réplica de los polvorines usados en la época del campamento minero Portovelo, cuando operaba la  South American Development Company -SADCO- (1896-1950).

La parte superior del museo es una adaptación del castillo o pique americano, construido en los años 20. Este espacio será parte de un complejo cultural, que incluye la reposición del almacén de la SADCO, puesta en valor de muros patrimoniales y áreas verdes, donde se incluye el parque de las culturas.

A pocos metros de donde se edifica el museo, la empresa lojana que   instala el alcantarillado causó varios daños en las ruinas históricas mineras consideradas bienes patrimoniales. Esta construyó un canal  que afectó principalmente los muros y parte de un horno donde se fundía el oro.

A pesar de que la intervención en la zona se hizo sin autorización no se han tomado medidas preventivas. (I)