La Agencia Nacional de Tránsito (ANT) y la Agencia Metropolitana de Control (AMC) controlaron ayer las miniterminales que las operadoras de transporte interprovincial poseen dentro de la ciudad.

El objetivo fue verificar que las cooperativas cumplieran la resolución 001 emitida por ANT a inicios de año. El documento señala que “todas las instalaciones físicas de propiedad de las operadoras ubicadas fuera de los terminales terrestres autorizados, deberán ser utilizadas únicamente como oficinas administrativas”. En Quito, las estaciones autorizadas son Carcelén (norte) y Quitumbe (sur).

“La ANT está socializando la resolución 001 y verificando que se cumpla la ley. La empresa de transporte que no acate el reglamento será sancionada con una multa de 4 remuneraciones básicas ($ 1.360) y se considerará una contravención de 1ª clase”, señaló, Juan Santillán, funcionario de la entidad.

Las microterminales movilizaban alrededor de 7 mil pasajeros diarios; gerentes y administradores de las empresas dijeron creer que la medida les afectará al reducir el número de usuarios. Según ellos, los quiteños están acostumbrados a tomar las unidades en esos sitios.

Alex Emmanouilidis, gerente de la empresa Transportes Ecuador, comentó que no entiende la decisión e indicó que con la resolución se afecta principalmente a los pasajeros debido a la distancia que ahora deberán recorrer para embarcarse.  

Segundo Villavicencio y su esposa Eliana, quienes ayer viajaban a La Concordia (Santo Domingo), comentaron que su situación se complicaba ya que gastarían más dinero, porque tomar una taxi desde calle 18 de Septiembre a Quitumbe, les significaría de $ 10 a $ 12.

Entre tanto, el Cabildo anunció la implementación del Plan Operativo Expreso para facilitar el traslado de pasajeros desde y hacia los terminales de Quitumbe y Carcelén. Para ellos se habilitó en la parada del Trolebús de El Ejido 8 buses tipo que partirán hacia los terminales terrestres sur y norte. Las unidades atenderán de 06:00 a 23:00.