Hace ya quince años, en un ensayo famoso sobre el giro a la izquierda, Jorge Castañeda instaló la idea de que en la región coexistían dos izquierdas, una institucional y otra populista. Mientras la izquierda institucional era la heredera de las organizaciones tradicionales del sector, la populista se podía rastrear a los movimientos del siglo XX encabezados por liderazgos carismáticos. Si una era reformista, internacionalista y amigable con los mercados; la otra se caracterizaba por ser nacionalista y nostálgica del populismo latinoamericano histórico y las economías más cerradas. Las distinciones eran así tanto de música, como de letra.

Actualmente, es posible observar en la derecha una diferenciación similar. En el siglo XXI encontramos una derecha más internacionalista, de corte liberal y empresarial y que es gobierno actualmente en Colombia, Chile, Perú y Uruguay. Esta derecha, con diferentes grados de apertura en temas culturales y de apego a las fuerzas del orden pero unida en la defensa de la economía de mercado, se ve ahora interpelada por la emergencia de una derecha de talante populista, nacionalista y caudillista en su liderazgo. En Brasil, Jair Bolsonaro ha encarnado este tipo de derecha que se jacta de tener una relación directa con el pueblo, que defiende a ultranza los roles de género tradicionales y que añora sin complejos las épocas militares de antaño.

La derecha populista pretende ser (o llegar a ser, en la mayoría de los países) una fuerza conservadora de masas que se articula en base a ciertas congregaciones religiosas y con las fuerzas armadas. Si bien algunos de sus atributos varían de caso a caso, como una estrategia económica más proteccionista o bien neoliberal, otros son parte identitaria de este sector, como la oposición directa a los avances en términos de ampliación de derechos de grupos históricamente vulnerados. El surgimiento de esta derecha polariza a las sociedades latinoamericanas y tensiona a la derecha institucional y al espectro político en general. Queda por verse entonces si este es un fenómeno que alcanzará posiciones de poder relevantes en otros países latinoamericanos o si pasará a engrosar la larga lista de organizaciones efímeras típicas de la región. (O)

Universidad Católica de Chile y Red de Politólogas