Ramiro González, en el centro de las disputas
El presidente del partido Avanza (listas 8), el lojano Ramiro González Jaramillo, está envuelto en dos frentes de división y disputa: uno interno, porque el secretario general de esa organización nacida jurídicamente el 15 de junio de 2012 lo acusa de violar los estatutos al no dar paso a la alternabilidad y democracia y otro externo, en lo que antes fue la coalición política la Unidad.
Desde el reconocimiento oficial de Avanza como partido político en el CNE (2012), González ha sido el presidente nacional, Carla Rangel Alvarado, vicepresidenta y John Argudo Pesántez, secretario general.
Dos años debía durar en el cargo, sin embargo, González no convocó a la convención para elegir nueva directiva y ha permanecido en el cargo 4 años, inobservando los estatutos.
Argudo denunció que González ahora, repentinamente, convocó a la convención nacional del partido a realizarse en Portoviejo (Manabí), para hacerse reelegir, lo que significa que no habrá relevo, alternancia ni democracia interna.
“Él (González) ha convocado a los 4 años para reelegirse dos veces más y, seguramente, 4 años más. Esos son temas que no debían ponerse en este momento, porque hay prioridades mayores que resolver como el caso de candidaturas y ahondar con esto es ponerle más leña al fuego dentro de la organización”, señaló.
Argudo, fundador de Avanza, destacó: “en una organización de estas, ¿qué haces tú si no tienes relevo ni alternancia y que solo una persona es dueña de la organización, qué haces entonces?”.
“La decisión de González no permite que sea otro el presidente del partido, se ha venido armando el tema de la lista nacional (para la reelección). El miércoles pasado se cerró el proceso de inscripción de candidaturas, es decir, esto se ha hecho en la oscuridad. En esas condiciones es complicado que nosotros podamos pedirle a Ramiro, que si es el problema en la Unidad, deje que vaya otro compañero, porque creo que para eso somos tantos afiliados al partido”, añadió.
Para conocer cuál es la versión de González, este diario lo llamó varias veces a su celular, pero no respondió. Allegados a Avanza señalaron que está en reuniones y que el domingo (mañana) se pronunciará.
Frente de disputa externa
Ramiro González también enfrenta una férrea disputa en lo que hasta hace pocos días era la alianza política la Unidad, gestada por el alcalde de Guayaquil y líder del Partido Social Cristiano (PSC), Jaime Nebot, para apoyar la candidatura presidencial de Cynthia Viteri.
Existe fricción en los acuerdos con los movimientos que aún respaldan a la socialcristiana. Aunque hay consenso en el tema del binomio que será decisión de Viteri, el problema y disputa radica en la nominación de asambleístas nacionales, lo que podría provocar una ruptura definitiva de esos aliados políticos: Avanza y Concertación.
González busca ser primero en la lista de postulantes a asambleístas nacionales, espacio que también es reclamado por César Montúfar, de Concertación, quien al ser consultado sobre el tema no confirmó una eventual separación política por ese motivo y aseguró que “con o sin unidad apoyaremos a Cynthia Viteri para la Presidencia”.
Nebot dijo esta semana que Viteri ha sido muy clara respecto a las alianzas con otras agrupaciones, y que le comunicó que tomará una decisión a más tardar este lunes.
Ayer, en una entrevista para el portal Ecuadorinmediato.com, el dirigente socialcristiano, Pascual del Cioppo, negó un distanciamiento con Avanza. Aclaró que la relación de Viteri y Nebot con el liderazgo de ese partido es muy buena. De igual forma todo quedará dilucidado mañana en Manabí. (I)
¿Quién es Ramiro González?
Dentro de la trayectoria política de Ramiro González, entre 1989 y 1992 fue secretario de Recursos Humanos y Empleo en el gobierno de Rodrigo Borja (ID).
De 1996 a 2000 fue consejero provincial y viceprefecto de Pichincha, cuando asumió como prefecto.
De 2008 a 2013 fue presidente del Consejo Directivo del IESS, y de 2013 a 2015 ministro de Industrias y Productividad.
Sus detractores lo responsabilizan por anomalías en el contrato del call center iniciado en marzo de 2012: a través de llamadas se agendaban citas médicas para los afiliados. En este caso, la Procuraduría detectó que la contratación se dio sin contar con la certificación de fondo actualizada. En el Informe de la Contraloría se establecieron indicios de responsabilidad penal contra 35 funcionarios del IESS y la empresa Recapt. Además, se detectaron pagos injustificados a dicha empresa.
También se presentaron polémicas, entre ellas, por los contratos con la ‘Clínica González’, cuyos dueños son primos hermanos de Ramiro. A fines de 2015, un informe de la Contraloría concluyó que los contratos de prestación de servicios firmados entre 2009 y 2012 entre el IESS y dicha clínica fueron ilegales.
En noviembre de 2015, el nuevo presidente del Consejo Directivo del IESS, Richard Espinosa, presentó un informe en el que acusó a González de seis presuntos casos de corrupción en su administración: la compra de medicina caducada y la adquisición de equipos médicos oftalmológicos sin especialistas que puedan manejarlos. (I)