A 30 días de que se celebren las elecciones a diferentes dignidades en el país, el Consejo Nacional Electoral (CNE) y la Cancillería de Ecuador firmaron acuerdos con la Misión de Observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA).

En este sentido, los representantes de la Misión, presididos por Leonel Fernández, acogieron a la petición de Ecuador para que observen estas elecciones y establezca los puntos a que deberán superarse para futuros comicios.

Además, los representantes acudieron a las reuniones que solicitó el Acuerdo Nacional por el Cambio y Alianza PAIS para emitir sus sugerencias y observaciones.

Leonel Fernández, expresidente de República Dominicana, habló con EL TELÉGRAFO antes de dejar el país para exponer sus puntos de vista sobre este proceso que incluye el actual momento de campaña.

¿Cuál es su primera lectura del proceso que se está siguiendo de cara a las elecciones en Ecuador?

Ecuador es un país que está en calma, donde hay una gran expectativa con respecto a la celebración de los comicios del próximo 19 de febrero. La población está en constante preocupación por estas elecciones y todas las fuerzas políticas se mueven en esa dirección. Toda la atención del país, todo su interés está concentrado en ese certamen electoral que define el futuro de la nación para los próximos años. Pero no solo de las elecciones, también de la campaña. Hemos encontrado un pueblo totalmente deseoso de participar para consolidar la democracia.

Hasta el momento ya ha tenido reuniones con diferentes partidos y movimientos políticos en el país, ¿cuáles han sido las principales quejas, sugerencias u observaciones?

Las quejas han girado en relación al tema organizacional, tanto de las elecciones como de la actual campaña. Es decir, estos partidos se refirieron a lo que tiene que ver con el padrón electoral, con el sistema informático y con los escáneres para la transmisión de datos. Esas inquietudes ya las hemos transmitido al Consejo Nacional Electoral (CNE) para su debido control.

Han tomado nota de eso y lo que se procura es el perfeccionamiento del sistema y dotar al certamen electoral de las garantías para conferir confianza y credibilidad con respecto a los resultados. Ahí es donde radica el éxito de este certamen para que finalmente los ciudadanos puedan sentirse tranquilos de que el ejercicio del sufragio ha dado legitimidad a la democracia ecuatoriana y que los resultados los representan.

¿En qué le pondrá especial interés como delegado de la OEA para las elecciones de Ecuador?

Nosotros aportamos a la democracia ecuatoriana y a su proceso electoral, con una misión de acompañamiento que trabajará con la autoridad nacional; expertos en lo que tiene que ver con organización electoral, expertos en sistemas de informática electoral, en tecnología electoral, en medios de comunicación y equidad de género. Todo esto es lo que la OEA aporta para un sistema electoral que sea transparente equitativo, que fomente la participación y que finalmente certifique la legitimidad de lo conquistado después. Esa es nuestra misión.

En la actualidad se han dado algunas transiciones en la región latinoamericana, ¿podemos decir que el neoliberalismo está regresando a nuestros países? ¿Cómo ve este proceso en la región?

Como jefe de Misión de Observación de la OEA estoy restringido solamente a referirme al certamen electoral aquí en Ecuador. Este tema yo me lo reservo para después de las elecciones. (I)