Flavio Alfaro (Manabí).-

Usando botas de caucho, sombrero y un poco agitado llegó Remigio Vélez desde el recinto Estero Bajo hasta la unidad educativa Flavio Alfaro de ese cantón manabita. “Dejé lo que estaba haciendo (elaborando quesos) para ejercer el voto; salgo contento. Ahora ya estoy de regreso a casa”.

En ese recinto las votaciones comenzaron con algo de retraso, a las 07:20, lo que ocurrió también en cantones como Chone y Tosagua.

Mary Mero, coordinadora de mesas del CNE en el lugar de votación de Vélez, explicó que las puertas se abrieron a las 07:00, pero que el proceso no se inició porque había un paquete a nombre de una persona que no arribaba.

Washington Zambrano, habitante de la zona central del cantón Flavio Alfaro, dijo que, afortunadamente no llovió, pero enfatizó que  eso no le habría impedido acudir a ejercer su derecho de sufragar.

En Chone, en el centro educativo El Bejucal, cerca del mediodía, había votado el 40% de los empadronados. Esto se replicaba en otros recintos del cantón manabita.

La mayor dificultad era el desconocimiento de los electores sobre su lugar de sufragio. En Tosagua hubo personas, como José Delgado, que desconocían que habían sido asignadas a nuevos recintos porque los anteriores (3 en total) resultaron afectados por las lluvias recientes.

Otros, en cambio, sí se enteraron de las modificaciones. Ese fue el caso de Diana Zambrano, quien el sábado se enteró de que debía acudir a la unidad educativa Magdalena Dávalos, en lugar de la escuela Carlos Pólit Ortiz. (I)