El plazo vencerá el 12 de abril próximo
Formularios de Yasunidos son cuestionados por CNE
La recolección de firmas del colectivo Yasunidos para convocar a una consulta popular sobre la explotación del bloque ITT estaría por cumplir su objetivo, según los ecologistas.
Hasta el momento, el grupo de jóvenes, que se opone a la explotación petrolera en la zona, ya habría recogido cerca de 500 mil rúbricas. Necesitan el apoyo del 5% del padrón electoral, es decir 583.323 firmas. Deben entregarlas, máximo, el 12 de abril al Consejo Nacional Electoral (CNE).
Representantes de Yasunidos denunciaron un supuesto “boicot” con la intención de confundir a la ciudadanía sobre la pregunta que el colectivo quiere consultar a la población.
Con el objetivo de dejar el crudo en el subsuelo de los campos Ishpingo, Tambococha, Tiputini (ITT) ellos quieren preguntar “¿Está usted de acuerdo en que el Gobierno ecuatoriano mantenga el crudo del ITT, conocido como bloque 43, indefinidamente bajo el subsuelo?”.
Uno de los voceros de Yasunidos, Patricio Chávez, denunció una campaña sucia del colectivo Yasuní Sí, que supuestamente plagió el logotipo de la organización. Estos últimos presentaron otra pregunta al CNE para apoyar la explotación del crudo y garantizar que los recursos sirvan para dotar de servicios básicos a los sectores más pobres.
DATOS
El pasado 15 de agosto, el presidente Rafael Correa anunció la explotación petrolera del uno por mil del Parque Nacional Yasuní y puso fin a la iniciativa mundial Yasuní-ITT.
Los alcaldes amazónicos también presentaron un pedido de consulta popular ante el CNE. Luego de las elecciones seccionales se evidenció que de 29 alcaldes que apoyan la política petrolera del Gobierno, solo 21 buscaron la reelección. Sin embargo, solo 5 lograron una curul. Y 8 no se presentaron como candidatos.
Los burgomaestres iniciaron la recolección de firmas la segunda semana de enero.
El Movimiento Ruptura expresó ayer en un comunicado su solidaridad con la plataforma Yasunidos y llamó a la población a permanecer “vigilantes” y no dejar solos a quienes impulsan esta iniciativa.
El colectivo Yasuní Sí fue organizado por los alcaldes amazónicos que el año pasado apoyaron la decisión del presidente Rafael Correa de explotar el bloque ITT.
Los alcaldes también presentaron un proyecto de consulta y retiraron formularios del CNE.
Desde el 8 de marzo circula en diario El Comercio un inserto que contiene el formulario y un instructivo para llenarlo.
Pero Chávez denunció que el pasado miércoles circuló otro documento similar, se copió el diseño, incluso tiene los mismos sitios de recolección de firmas; lo único que cambia son los números telefónicos. En Guayaquil está circulando un texto que alerta a la población con lo que firma. Todo esto fue denunciado por Yasunidos.
Pero hay otra polémica. El CNE advirtió que el tamaño del formulario que circula en el periódico capitalino y el tipo de papel utilizado no son los permitidos.
El presidente del CNE, Domingo Paredes, dijo que el 14 de octubre se entregó a los dirigentes de Yasunidos un dispositivo con la información de los formularios y dos muestras impresas. Paredes hizo una comparación del papel, que debe ser bond y en formato A4 estandarizado, con el que salió en el diario quiteño, con el que existe una evidente diferencia en tamaño.
Explicó que para la verificación de las firmas habrá inconvenientes. “Las medidas son claves y el tipo de papel”, explicó Paredes.
La consejera Nubia Villacís contó que el CNE cuenta con escáneres especiales para detectar las firmas y si el tamaño de la hoja es más pequeño y el tipo de papel varía, la máquina no podrá reconocerlos. Para esta tarea cuentan con base de datos del Registro Civil y la Agencia Nacional de Tránsito.
Capacitación
El abogado Julio César Trujillo, quien representó jurídicamente a la organización, solicitó al CNE que capacite a las personas que lideren la recolección de firmas. Esto efectivamente ocurrió en octubre pasado.
El CNE capacitó a 98 personas en Quito y en cada provincia se enviaron a sus técnicos para este proceso.
Yasunidos reconoció que el CNE dio capacitación a sus voluntarios, pero que en ningún momento se indicó sobre el formato de los formularios. Otro de los inconvenientes de los que se han quejado los jóvenes es el impedimento para ocupar espacio público, ya que el organismo electoral se negó a facilitarles una carta con esa autorización.
Verificación de firmas
Domingo Paredes exhortó a todas las organizaciones que lideren la recolección de firmas que respeten el tamaño estandarizado, ya que podría caerse en el mismo delito que ocurrió cuando verificaron las firmas de las organizaciones políticas que se inscribieron para las elecciones de 2013.
En la parte inferior del formulario consta el nombre, número de cédula y firma de las personas responsables que dan fe pública de que las rúbricas de los ocho ciudadanos que firman en el documento son válidas y legítimas. Sino consta esa información podría configurarse un “delito grave” de tipo civil o penal, aseguró Paredes.
“Esto no fue consultado con el CNE y no tenemos responsabilidad. Hay un abuso de derecho”, insistió la autoridad.
Antonella Calle, otra de las voceras de Yasunidos, se ampara en el artículo 169 de la Constitución que señala que “no sacrificará la justicia por la sola omisión de formalidades”. Con eso, resaltó, el objetivo es llegar al millón de firmas y que se convoque a la consulta.
Una vez que se entreguen las firmas, el CNE las validará y si se cumple con el número necesario el organismo enviará a la Corte Constitucional el respectivo informe de “legitimidad democrática”.
Entonces, este tribunal deliberará si la pregunta es o no constitucional. No hay tiempo definido para ese trámite, que podría durar meses.
Si la pregunta es constitucional, entonces el CNE deberá convocar a la consulta popular. Si la CC no considera legal la interrogante, el proceso vuelve a cero, es decir redactar otra inquietud, solicitar los formularios y recoger nuevamente las firmas.