Compromiso ecuatoriano con la Corte Interamericana de Derechos Humanos
El presidente Rafael Correa afirmó que "está todo preparado para tener nuestro propio sistema latinoamericano de derechos humanos", así lo dijo durante el enlace 409, emitido desde Chimbacalle en Quito.
Su postura fue crítica respecto a los hechos que en el pasado han evidenciado abusos por parte de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos con sede en Washington.
La entidad intentó dictar medidas precautelares por casos como el de las niñas que sobrevivieron a unos conflictos en la Amazonía ecuatoriana, y sobre la acusación que recibió el presidente, por atentar contra la libertad de expresión según la denuncia presentada por Cléber Jimenez, Fernando Villavicencio y Carlos Figueroa.
El Ejecutivo consideró que "debe haber una orden parar ciertos abusos inmediatamente. No lo que está haciendo la comisión que declara como libre expresión una denuncia penal infundada contra el presidente de la república".
Además dijo que "tenemos la Corte Interamericana de Derechos Humanos ratificada por 24 países Latinoamericanos", mientras que la Comisión con sede en Washington "que no ratificó en el pacto de San José , pagan para controlar a otro y con una ligereza total, sin apego de derechos, se creen por encima de los Estados, creen que están realizando la kermés del barrio, con una pobreza de decisiones terrible".
Correa informó que parte de estas decisiones se basan en que el 29% del personal de la Comisión de Washington es norteamericana, sin haber firmado ni ratificado la convención de San José, "¿quién puede justificar tamaña contradicción?", cuestionó.
El canciller Ricardo Patiño comunicó la forma en que Ecuador respondió a las acusaciones referidas por el caso de las niñas Taromenane.
"No tenían ninguna razón y nosotros no le reconocemos el derecho de dictar medidas cautelares, porque no las tienen en la Convención Interamericana de Derechos Humanos, ni las tienen en el estatuto de la propia Comisión; la tienen en un reglamento que se la inventaron", reveló el canciller.
Patiño explicó que se envió una carta a la Corte IDH sobre la protección que el país está otorgando a las niñas amazónicas, ante lo cual la entidad respondió a la Comisión que no tenían ninguna injerencia sobre el caso, ni para emitir medidas provisionales al Gobierno ecuatoriano.
La respuesta de la Corte IDH sobre este caso fue que el Ecuador estaba cumpliendo muy bien el papel de defender los derechos humanos, a lo cual el canciller expueso que "ese bofetón que se le dio a la Comisión todavía ellos no saben recuperarse de eso", dijo.
Ricardo Patino reveló que el comisionado de esta entidad se reúne 2 veces al año, durante 15 días, donde lo que hace es firmar "con una ligereza en los casos".
El presidente confirmó que está todo listo para tener un sistema latinoamericano de Derechos Humanos, reconocido por 24 países y "darle más personal para que pueda promocionar los derechos humanos y no necesitar de esa comisión adefesiosa que se roba funciones que no tiene, y jueces a tiempo completo".
El canciller resaltó el agradecimiento de la Corte IDH por la contribución voluntario de $1 millón otorgado por Ecuador para fortalecer financieramente este sistema, sin ninguna condición.
Pese a ello, Rafael Correa enfatizó en que " la Corte IDH debe tener ingresos previsibles, no fruto de voluntarismo de diferentes países, es decir debe tener fuentes previsibles, estables e incondicionales de ingresos para que pueda actuar con absoluta independencia".
