Un dirigente absolutamente de izquierda
Marco Antonio Enríquez-Ominami Gumucio, chileno de 40 años y excandidato presidencial, es actualmente presidente de la Fundación Progresa y líder del Partido Progresista.
Es hijo del médico y dirigente del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) de Chile, Miguel Enríquez, quien fue asesinado durante el régimen militar de Augusto Pinochet. Por ese motivo, años más tarde, el joven político decidió adoptar el apellido de su padrastro, el político Carlos Ominami.
Entre 1990 y 2009 militó en el Partido Socialista, en el cual ejerció como diputado desde el 2006.
Tres años más tarde renunció a dicho partido para postularse a las elecciones presidenciales, en las que alcanzó el tercer puesto en el referéndum. Enríquez-Ominami fundó en 2010 el Partido Progresista, por el cual nuevamente se postuló como presidente en julio de 2013 y ocupó el tercer lugar.
Fundación Progresa, un Think Tank según su página web, busca diseñar, proponer y evaluar políticas públicas sobre pobreza, desigualdad y democracia.