Un grupo de manifestantes cerró esta mañana la carretera que une a Playas con Guayaquil, en reclamo por un supuesto fraude electoral. Luego se movilizaron hasta el ingreso al cantón (por el redondel) para intentar cerrarlo también.

En Playas, con el 12,50% de las actas escrutadas, la candidata Miriam Lucas (Centro Democrático-Alianza PAÍS) tiene el 21,83% de los votos; Salomón Aguirre (Movimiento Playasense al cambio) registra el 17,07%; mientras que Gabino de La A (Movimiento Renace Villamil Venceremos), el 14,72%.

Los protestantes no se identificaron como seguidores de algún partido en específico sino como "defensores de Playas", pero varios portaban banderas de los movimientos de Aguirre y de La A. Ellos dijeron que quieren que el Consejo Nacional Electoral (CNE) realice nuevos comicios en el cantón, al  mismo tiempo que gritaban: "Fuera Lucas", refiriéndose a la virtual ganador de la alcaldía.

Hasta el sitio llegó un piquete de al menos 60 policías que, comandados por el coronel Carlos Torres, lograron que los manifestantes desistan de cerrar la vía de ingreso a Playas. Los protestantes se retiraron cerca de las 12:30, pero dijeron que seguirán reclamando en el centro del cantón.

En las afueras del colegio Rashid Torbay, el recinto electoral más grande del cantón donde votan más de 3.000 personas, se encontraron otros ciudadanos de Playas que denunciaban fraudes en las elecciones, mostraron actas quemadas y que supuestamente fueron encontradas en la institución educativa.

Mientras que Miriam Lucas, en entrevista con EL TELÉGRAFO, aseguró que no puede decir nada sobre la suposiciones de los partidarios de otras listas.

"Nosotros ganamos con la voluntad popular del pueblo, nuestro triunfo es transparente porque lo tenemos reflejado en las actas", explicó mostrando los resultados que publica el CNE en su página donde ella va a la cabeza.

Acusó a Salomón Aguirre de atentar contra los bienes públicos e, incluso, aseguró que ese candidato tiene una denuncia del 2011 por este tipo de actos. 

"Playas no es ese grupo minúsculo que salió a reclamar, somos 42.000 habitantes, de los cuales 33.000 ejercen su derecho al voto según el CNE", enfatizó. Además, informó que las personas afines a su candidatura no están en las calles o en su central festejando para evitar conflictos entre partidos.

"Tuve que decirles que desalojen la central, que se vayan a sus casas porque comenzaron a golpear, dañaron el techo, tiraron piedras, a mí me tuvieron que sacar escondidas", contó Lucas.